Las bolsas asiáticas (especialmente las plazas chinas) lograron estabilizarse en la jornada del martes después de registrar descensos más acusados durante la sesión (el Nikkei terminó el día con una caída del 0,54%, hasta los 14.970,97 puntos). El índice MSCI Asia Pacífico cayó un 0,1% tras llegar a perder un 0,4% en algún momento de la jornada.

“Para el resto de la semana, el Nikkei puede moverse sin dirección y sin volumen porque los inversores necesitan más catalizadores para tomar posiciones”, dijo Masashi Oda, responsable de inversiones de Sumimoto Mitsui Trust Bank, a Reuters.

“Hay un poco de inquietud en torno a China y a lo que está sucediendo con su moneda”, señaló a Bloomberg Peter Esho, analista de Invast Securities. La caída del yuan en China está coincidiendo con esa decisión de algunos bancos chinos de frenar la financiación a los promotores inmobiliarios y a los sectores relacionados, tales como el del acero y el del cemento.

“El mercado va a seguir plano el resto de la semana. Los datos macro más importantes no llegan hasta la semana que viene. Europa va a seguir mejorando, al igual que Estados Unidos. Asia continuará, probablemente, consolidando aún más “, señala Esho.

N.A.