Y es que cualquier sistema (por muy bueno que sea… aunque no existen “buenos” sistemas y “malos” sistemas) genera señales que no tienen la misma importancia. Esto hace que muchos inversores pierdan demasiado tiempo en intentar aprovecharse de todas las señales, lo que genera un exceso de operaciones y, por supuesto, unos costes innecesarios.

En algún comentario anterior dijimos que lo importante para conseguir una rentabilidad de forma consistente es ser capaz de identificar aquellas señales que tengan una alta probabilidad de éxito. Su sistema de especulación debe ser capaz de identificar estas “buenas” señales y usted debe tener el coraje de apostar fuerte en estas circunstancias. No debe tener miedo a tomar más riesgo de lo habitual aunque su forma de actuar debe estar perfectamente establecida antes de que se produzca la señal.

¡Ojo! Esto no significa que una señal que su sistema identifica como “buena” o “fuerte” se traduzca necesariamente en una ganancia. Nadie puede garantizar esto. Simplemente indica que la probabilidad de ganancia es mayor que en cualquier otra situación. Recuerde que uno de los secretos del buen trading es
admitir que uno no sabe lo que va hacer el precio.

Identificar las señales fuertes y actuar en consecuencia es realmente lo que marca la diferencia en la cuenta de resultados de un trader.

¿Cómo diferenciar las señales fuertes de las débiles?
Esa es la gran pregunta. Más que intentar dar una respuesta que sirva para todos (difícil o imposible, por otra parte, ya que depende del sistema de especulación de cada uno) voy a intentar ilustrar esta cuestión con un ejemplo práctico.
Veamos los dos gráficos siguientes: el primero muestra la evolución del IBEX durante los meses de diciembre 2012 y enero 2013 y el segundo el comportamiento de este mismo índice durante abril y mayo del 2013.

Gráfico 1 a) IBEX 35: Diciembre – Enero 2013


Gráfico 2 a) IBEX 35: Abril – Mayo 2013


Aparentemente hay muchas similitudes entre ambos gráficos. Después de una fuerte subida el precio se desploma y rompe violentamente la media móvil de 10 sesiones (la línea en azul claro). En ambos casos podríamos decir que se trata de una señal fuerte, en principio bajista. Pero si vemos lo que ocurrió en los días posteriores, el comportamiento del selectivo fue completamente dispar. En un caso el precio continuó su subida, mientras que en el otro el IBEX registró una caída contundente.

Gráfico 1 b) IBEX 35: Diciembre – Enero 2013



Gráfico 2 b) IBEX 35: Abril – Mayo 2013


Evidentemente uno podría haberse aprovechado de ese movimiento posterior en las dos situaciones, poniéndose largo en el primer caso y corto en el segundo. Pero lo que tenemos que preguntarnos es por qué en un caso el precio prosiguió su tendencia alcista (y hubiese sido una señal malísima para el trader que hubiera apostado por el lado largo) y por qué en el otro se produjo un cambio de tendencia (convirtiéndose en una señal muy buena para el trader que se hubiera puesto corto).
La respuesta nos la da los gráficos siguientes en los que apreciamos que en ambos casos el precio estaba luchando contra una importante resistencia (que consiguió superar en el primer caso y no en el segundo). Esa lucha contra la resistencia era el filtro que el trader debería haber utilizado para valorar la posición a tomar.

Quiero decir con esto que en muchos casos la utilización de un determinado filtro (que puede ser una línea de tendencia, un soporte, una resistencia, un determinado indicador, etc) es lo que determina si la señal es buena o mala. En muchos casos también el trader de éxito es capaz de imaginar lo que debería producirse (en nuestros casos, ruptura de resistencia) para que una señal sea buena o mala.

Gráfico 1 c) IBEX 35: Diciembre – Enero 2013


Gráfico 2 c) IBEX 35: Abril – Mayo 2013