Como explica Masja Zandbergen, directora de Integración de Criterios ASG  de Robeco, “el interés por la sostenibilidad se distribuye entre distintas generaciones, y sus raíces tienen siglos de antigüedad”.

En su opinión, pensar que el criterio de inversión sostenible es mayoritario entre los inversores que nacieron en la década de los 80 es sólo un esteriotipo. Eso sí, de acuerdo con el último estudio de la entidad esta generación “ha crecido en la era de Internet y han dispuesto de mayor acceso a la información que pone de manifiesto actividades contrarias a la sostenibilidad, viéndose así más politizados por ella. Según un estudio realizado en EE.UU., los millennials son "la generación más progresista de los últimos 50 años", y están haciendo que el país sea más liberal. 

Pero cuando se trata de invertir los intereses de las distintas generaciones están más equilibrados.  Según una encuesta de Robeco entre sus clientes minoristas en Holanda, aproximadamente un 70% de los encuestados mayores de 50 años manifestó un claro interés por la sostenibilidad, frente al 66% del grupo de 34 a 50 años, y al 67% del de 18 a 34. En la firma explican que “aunque no se trata de un estudio científico exhaustivo, revela que la sostenibilidad disfruta de la misma popularidad entre las personas de mediana o avanzada edad que entre los millennials”.

Así, el promedio de recursos destinados a inversión sostenible en sus carteras fue del 29% para los mayores de 50 años, del 30% para el grupo de 34 a 50, y del 33% para los comprendidos entre 18 y 34 años, de manera que los millennials sí que presentan una ligera ventaja, “aunque poco significativa, en este estudio propio realizado por Robeco”, explican los autores del informe.

De acuerdo con estos gestores, la inversión sostenible se puso de moda recientemente. En concreto, apuntan que “si hablamos de "ponerse de moda", la auténtica consagración global de la sostenibilidad quizás pueda decirse que llegó con la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, conocida como la "COP21", celebrada en París en 2015. De ella salió el Acuerdo de París, en el que se retaba al mundo a limitar el calentamiento global a menos de dos grados centígrados sobre los niveles preindustriales. Fue ratificado por 174 países el 22 de abril de 2016, fecha que hoy en día ha sido bautizada por la ONU como el "Día de la Tierra", explica la gestora.

En opinión de Zandbergen  “aunque en el pasado la inversión sostenible haya sido un concepto nicho, nos encontramos claramente ante un punto de inflexión que no admite vuelta atrás”, augura.