Vamos pasando periódicamente momentos de tensión máxima, como el de hace un par de semanas para entrar en una fase en la que los mercados recuperan parte de las caídas. Un rebote que es donde estamos”, reconoce Nicolás López, director de análisis de MG valores. Este experto reconoce que “no hay solución a la vista pero mañana los mercados esperan noticias por parte de la FED, un acuerdo que permita aguantar algo más a Grecia y creo que la hoja de ruta está más o menos ahí”. Primero Grecia tiene que cuadrar sus cuentas, después se pondrán en marcha los mecanismos de estabilización pero “hasta entonces habrá mucha volatilidad”.


Lo más relevante es que el MIB-30 se ha dado la vuelta y sube un 1%. El que más sube entre los índices europeos. Berlusconi ha emitido un comunicado apuntando a que la decisión de S&P no refleja la realidad pues su gobierno ya estaba tomando medidas para fomentar el crecimiento además de añadir que parece una decisión tomada por las informaciones de los periódicos. “Las cotizaciones de los bonos de los países periféricos están en niveles tan bajos que el rating dice poco”, señala López en Radio Interconomia. Por otra parte, “sorprende que la agencia S&P diga que cree que el gobierno no será capaz de sacar adelante las medidas. Una especulación que no se entiende mucho en este momento”.


Iberdrola. No tendría una preocupación especial. Es cierto que la situación de la bolsa es la que es. Podemos seguir sufriendo volatilidad, el año que viene la bolsa no dará un rendimiento significativo pero el valor no tiene riesgos específicos. El negocio energético “a largo plazo seguirá dando un buen crecimiento y en ese sentido, no veo motivos para vender”.

Oro. Está funcionando como una especie de activo refugio “como una medida del miedo que hay en los mercados pero no sabemos a qué viene esta revalorización pues no atiende a medidas fundamentales, de demanda…”. El riesgo que ve este experto es que en cualquier momento esto se desinfle “pues si finalmente llega el acuerdo en Grecia, este metal desinflará su valor”. Si los bancos centrales entran en la dinámica de subir inflación, puede que el oro siguiera viéndose favorecido “pero no es el escenario más probable”.

Solaria. De alguna manera refleja que tiene capacidad para crecer en Italia –segundo mercado después de España- y esto es importante.

Telefónica. El riesgo de que recorte dividendo es casi cero pues lo mantendrá en un escenario negativo, lo que puede hacer es recortar sus inversiones pues "el dividendo no depende tanto de la generación de beneficio neto como del cash flow". Si en algún momento decide recortarlo tendrá que ver si puede buscar vías de financiación alternativas como las que está encontrando. Los 11 euros es la zona de máxima caída "entendiendo que será el final del proceso pero en torno a 16-18 euros me parece una valoración acertada de la operadora".

E.On. Animaría a comprar más acciones del valor sólo en el supuesto de que tenga una cartera diversificada y no suponga un peso excesivo en la cartera. Es uno  de los valores más atractivos que hay, no sólo por su  dividendo sino porque habría descontado el panorama negativo en torno a la energía en Alemania y es de las compras más claras que encuentra a nivel europeo.

Total.  Cotiza muy baja, aunque es algo general en las petroleras "pues se mueven mucho por las expectativas sobre el precio del crudo". Lo que hay ahora es el temor a que el crecimiento no sea el que se pensaba para el petróleo y "a estos precios también me parece una compra clara pues tiene reservas de crudo muy diversificadas y, en ese sentido, con este dividendo veo difícil pensar que el precio del crudo bajará más".

BME. Está aguantando bien, es una compañía con un nivel de liquidez adecuado. Su volúmen de negocio ha bajado y puede terminar el año con una caída moderada en su volumen. En 17.5-18 euros es el nivel adecuado para comprar  "no sé si llegará ahí pero creo que todavía se espera una última caída en los mercados que puede llevar al valor a esos niveles".

En cuanto a las recomendaciones, López indica que estamos en la fase final del proceso de corrección que llevamos desde principios de año. Un inversor con liquidez se debería estar planteando invertir a precios muy atractivos. Mapfre este año alcanzará beneficio neto en su historia y precisamente por el tema de la deuda soberana - que le ha afectado- ha recogido en su precio unos niveles aptos para invertir.