ACS se convierte en la tercera acción más penalizada de las sesión por culpa de sus cuentas. Los inversores salen a espuertas del valor, como muestra de enfado por ver aumentada la deuda de la compañía, lo que en teoría, no iba a hacer la directiva de ACS.


Ayer al cierre conocimos que ACS obtuvo un beneficio neto de 551 millones de euros en los primeros meses, cifra similar a la del mismo periodo del año anterior. Sin embargo,
lo que cabrea a los accionistas es que el agujero deficitario de la compañía de construcciones y concesiones aumentó un 16,8%, 1.638 millones más, hasta situarse en 5.872. Desde luego, esto va en contra de la estrategia de la directiva centrada en reducir la deuda.

Pero el alza de la deuda no sólo provoca la huida de los inversores, también ha llevado a la compañía a cancelar la emisión de bonos prevista para finales de año y con la que el grupo presidido por Florentino Pérez preveía captar hasta 1.500 millones, lo que habría cubierto la práctica totalidad del aumento de deuda experimentado por ACS este ejercicio.

No obstante, ante la alarma suscitada, Ángel García Altozano, directro general corporativo de ACS, se ha apresurado a decir que prevén reducir su endeudamiento hasta el entorno de los 4.000 millones de euros a cierre de ejercicio, gracias a las desinversiones de activos no estratégicos. Con ello, ACS recortaría en un 31% el pasivo de 5.872 millones.

Así pues, los inversores no se cortan al salir de la acción. Hoy ACS se desploma casi un 5% para cotizar sobre los 27 euros. En esta zona el valor tiene un soporte relevante, pues supuso el máximo infranqueable durante el primer trimestre. Si aguanta por encima, podría volver a los 30 euros, pero por ahí pasa su directriz bajista de medio plazo, por lo que, hasta que no cotice por encima de 30, seguirá siendo bajista.

En cambio, si pierde los 27 euros, podría caer hasta los 26 euros. No obstante, el RSI marca una elevada sobreventa (35 puntos) por lo que es de esperar que el valor experimente algún tipo de rebote en próximas sesiones. De hecho, en esta semana se ha dejado ya más de un 8,5%, por lo que la acumulación de tanta penalización podría dar lugar a alguna subida.

acs


Por fundamentales, José Lizán, gestor de SICAV de Auriga SV, valora la estrategia de ACS: “está intentando captar demanda en los países core, lo que veo muy acertado. De hecho, ACS me parece la mejor apuesta dentro del sector constructor”.