A través de cuatro gráficos, estos expertos nos desgranan dónde están los focos de incertidumbre para este ejercicio 2023 que ha comenzado con mucho optimismo en los mercados después de dejar atrás uno de los peores años de la historia en el mercado de bonos y renta fija. 

Los bancos centrales han dejado claro que seguirán con subidas en los tipos de interés, la inflación - especialmente la subyacente - no termina de bajar, sigue la guerra en Ucrania…motivos de incertidumbre que siguen sobre la mesa. Y a eso se une la desaceleración/recesión a la que parece que están abocadas las economías este año. Desde el lado de la renta variable, estos expertos reconocen que es clave ver cómo evolucionan los resultados corporativos, que antes o después tendrán que empezar a descontar la realidad económica a la que nos enfrentamos. Un activo en el que se mantienen neutrales o infraponderados. En la parte de renta fija, algo más constructivos pero sin excesos y fijando la atención en deuda corporativa de grado de inversión, pagarés, y deuda subordinada financiera para perfiles algo más sofisticados. Con el foco en la calidad. 

Dentro de la renta variable, si hay un sector que ha sufrido durante la caída de las bolsas ha sido el tecnológico. Empezó con la crisis de suministros una vez se reactivó la economía y la demanda tras el covid, luego llegaron las subidas de tipos de interés y el incremento en los rendimientos de los bonos... Un sector que se ha penalizado de forma indiscriminada especialmente cuando hay compañías que no tienen deuda y que, siendo selectivos, pueden ofrecer potencial. Y mientras la tecnología de EEUU sufre, las tecnológicas chinas han comenzado un 2023 con fuertes rendimientos al calor de la apertura de la economía china en su estrategia contra el Covid. Un movimiento demasiado optimista en los mercados en el que no hay que obviar que, de un momento a otro, vuelva a pesar la guerra comercial con EEUU. 

Por último, ¿Europa o EEUU? Por valoración, Europa está más barata pero también tiene factores de incertidumbre que hagan que parte de lo positivo ya se haya vivido con la rentabilidad que acumulan los índices del viejo continente desde finales de diciembre. En esta mercado, optar por bancos y energéticas, que lo pueden hacer bien - lo que también puede beneficiar a la bolsa española - y no perder de vista que las subidas de tipos continuarán porque la inflación seguirá siendo eleva.