Estados Unidos está "muy abierto" a imponer sanciones a la industria del petróleo y el gas de Rusia, dijo el miércoles la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, quien añadió que se está sopesando el posible impacto en los mercados globales y en los precios de la energía en el país.

Al ser consultada sobre si Washington y sus aliados occidentales impondrían sanciones a la industria energética y del gas de Moscú, Psaki dijo en una entrevista con la cadena MSNBC: "Estamos muy abiertos".

"Lo estamos considerando. Está sobre la mesa, pero tenemos que sopesar cuáles serán todos los impactos", añadió.

Pero hay voces que señalan que Occidente sigue siendo muy laxo a la hora de actuar contra Rusia, cuyas tropas ya estarían llegando a Kiev, al tiempo que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, denuncia que los han dejado solos frente al ejército de Putin.

Según explica Alexis Ortega, de Finagentes Gestión, lo que hay que tener en cuenta es que "se les ha olvidado decir a la población que estas sanciones no solo van a crear problemas a la economía y a los ciudadanos rusos, sino que también van a crear problemas a los ciudadanos europeos". 

Sobre la mesa, cuánto tiempo puede aguantar la población europea sin la energía de Rusia: por un lado, el desabastecimiento de petróleo y gas ruso y, por otro, el incremento de precios que se está produciendo y que seguirá en los próximos meses. El estado de las sanciones, apunta Ortega, evidencia la dependencia energética que Europa tiene de Rusia. 

Apunta además el experto que desde Occidente se ha dejado abandonada a Ucrania, porque "ninguno quiere verse inmiscuido militarmente en esta situación", por lo tanto "vamos a seguir tirando de palabrería, pero mucho más allá de lo que ya se ha hecho, no vamos a poder hacer", explica.