Hablamos de mercados. En EEUU estamos viendo un giro en las negociaciones de la guerra comercial. ¿Cómo valoráis esta situación?

Es complicado valorarlo y entiendo que no es lo mejor estar pendiente de lo que diga Trump en sus mensajes.  Veníamos de una situación de calma en la tensión comercial y Trump viene a romper esa relación de cordialidad en la que estaban trabajando pero no cambia  tanto la visión que podamos tener a largo plazo. Nuestro enfoque con la guerra comercial es que es algo que está fuera de nuestro control, no podemos hacer previsiones al respecto e intentamos alejarnos de ese ruido. Llevamos 17 meses de guerra comercial, puede ser una estrategia de Trump y nosotros lo que buscamos son estrategias que nos permitan no estar tan pendientes del minuto.

Esto en un entorno de bajadas de tipos por parte de los bancos centrales. ¿Cuáles son sus previsiones?

Las perspectivas económicas tanto en china como EEUE o Europa se han estabilizado. Los mercados por otro lado parecen afrontar con cierto pánico el fin de las medidas de flexibilización que han estado en vigor tanto tiempo. Una vuelta a niveles de cero implicaría repuntes de los tipos a largo plazo que implicarían perder capital en la deuda pública. En EEUU la economía está en buena forma, tanto datos de mercado laboral como la encuesta ISM de manufactureras son sólidos. Eso nos da tranquilidad. Si como nosotros prevemos el crecimiento se estabiliza a nivel global e incluso repunta algo para llegar al 3%- 3,4% no será necesario bajar los tipos  y además los bancos centrales a nivel global están cansados y no tienen esa confianza que tenían antes en el poder reactivador de las medidas de recortes de tipos. En este escenario probablemente será necesario activar palancas como puedan ser las políticas fiscales o presupuestarias pero eso será en 2020

 Tenemos máximos históricos en Wall Street, máximos anuales en las bolsas europeas ¿es sostenible esto?

Con las bolsa en niveles de media del 20% y todas las categorías de activos en positivos la pregunta es ¿y ahora qué? ¿Me salgo o me quedo? Comentaba a nivel macro sobre una posible estabilización, a nivel micro los resultados en EEUU han batido las expectativas y en Europa han cumplido las expectativas aunque seguían a una rebaja de las expectativas. Las compañías deberían beneficiarse de ese entorno de mejores perspectivas de crecimiento, de una relajación monetaria y de la reducción de tensiones comerciales que hemos visto en los dos últimos meses. Las empresas más cíclicas y pequeñas y medianas compañías podrían beneficiarse en este entorno y más que una dinámica de resultados nos caber esperar un crecimiento de los múltiplos por la reducción de la prima de riesgo y el incremento de los dividendos.

Otro factor que podría soportar las valoraciones o incluso un repunte sería un  tema técnico. Nunca antes un rally como el actual habría venido acompañado de salidas continuas delos flujos bursátiles. Si se constatan estas mejoras uy los inversores institucionales vuelven al mercado podría ser un soporte o repunte para seguir subiendo.

¿Podría decirnos dónde hay oportunidades de inversión?

Dentro de los activos líquidos cotizados la bolsa es el único activo donde hoy se encuentra algo de valor con unos rendimientos implícitos del 7% en un entorno de tipos bajos e incluso negativos es el único sitio donde encontramos valor. En el mercado de crédito se puede encontrar algo de carry pero en términos absolutos el valor es más pequeño. Nosotros somos conscientes de la incertidumbre macro que hay y  recomendamos mantener exposición a renta variable pero nuestra recomendación es estar neutral en una cartera balanceada. Necesitamos una señal macro clara que nos permita aumentar nuestra exposición a renta variable. En esta situación una estrategia que podemos recomendar sería repartir las asignaciones a activos de riesgo, en este caso bolsa, mensualmente con un horizonte de medio – largo plazo.

Además buscar inversiones temáticas que sean una realidad contrastada pero que tienen mucho recorrido. Temas como la inteligencia artificial, que puede tener mucho recorrido, acaba de llegar a nuestras vidas pero supondrá un cambio disruptor en la forma de hacer las cosas.