Arrancamos el segundo semestre con el S&P 500 y Nasdaq en máximos, y las bolsas europeas con importantes revalorizaciones. ¿Seguirá siendo esa la tónica que marque la evolución de lo que resta de 2025?

De cara al segundo semestre de 2025, en nuestra opinión, las bolsas —tanto la americana como la europea— no están excesivamente sobrevaloradas. Es cierto que la bolsa europea ha tenido un comportamiento muy positivo en el primer semestre del año, incluso mejor que la bolsa americana. Sin embargo, ambas terminan el semestre con una ligera sobrevaloración, aunque nada dramático, lo que deja margen para que puedan seguir subiendo en la segunda mitad del año.

¿Cuáles son las claves a tener en cuenta? En primer lugar, una de las cuestiones que se resolverá pronto es la relacionada con los acuerdos comerciales de Estados Unidos con otras regiones, especialmente con la Unión Europea; creo que esto puede suponer un punto de inflexión, aunque confío en que no haya sorpresas negativas. En segundo lugar, está el factor de la liquidez, que es fundamental para los mercados; en principio, debería continuar ofreciendo un entorno favorable para las bolsas. Y, dentro de este aspecto, también es clave la actuación de los bancos centrales. El Banco Central Europeo se ha adelantado a la Reserva Federal en la bajada de tipos de interés, y eso explica en parte el buen comportamiento de las bolsas europeas frente a las norteamericanas. No obstante, en algún momento la Fed también podría iniciar un ciclo de bajadas, lo que daría un impulso adicional a los mercados.

Por tanto, en general, veo un horizonte relativamente despejado para las bolsas. Eso sí, será importante seguir de cerca los datos de empleo. Creo que, si hay un factor que podría poner en peligro la continuidad del movimiento alcista, es precisamente ese: un deterioro del empleo podría justificar nuevas bajadas de tipos, pero si los datos son demasiado negativos, no sería una buena señal para los mercados. En cualquier caso, a día de hoy, diría que el panorama sigue siendo favorable para que las bolsas continúen subiendo en la segunda mitad del año.

¿Qué hay de las 7 Magníficas? ¿Recobrarán su protagonismo en bolsa?

Las 7 Magníficas no han sido tan magníficas como su nombre indica. A nivel de rentabilidad, se han registrado diferencias significativas. Desde principios de año, Nvidia y Microsoft han subido más del 15%, al igual que Meta, logrando un buen semestre. Sin embargo, compañías como Apple y Tesla han sufrido un duro castigo en estos primeros seis meses.

Hablar de las 7 Magníficas resulta impreciso debido a las diferencias notables en rentabilidad y valoración. Algunas empresas parecen ya caras: NVIDIA, después de su fuerte rally alcista, está sobrevalorada en más de un 10%; Tesla también se considera muy cara; y Apple está ligeramente sobrevalorada. En cambio, compañías como Alphabet muestran una infravaloración cercana al 25%, y Amazon y Meta (Facebook) resultan atractivas desde el punto de vista de valoración y nos gustan.

En cuanto al sector tecnológico y a las compañías de crecimiento en general, la perspectiva es optimista. Es probable que en el segundo semestre se produzcan bajadas de tipos de interés. En 2022, la tecnología fue muy perjudicada por el aumento de los tipos. Por lo tanto, si estas compañías sufrieron con esas subidas, deberían beneficiarse de unas posibles bajadas por parte de la Reserva Federal, lo que favorecería al sector de crecimiento. 

En Europa, los inversores se están lanzando a buscar oportunidades entre compañías golpeadas, entre ellas las de sectores como el lujo y la energía renovable. ¿Es una buena opción?

Sí, especialmente en el sector del lujo; el sector de las energías renovables resulta más difícil de analizar con profundidad en comparación. El sector del lujo ha sufrido mucho por la situación en China, pero presenta valoraciones atractivas, especialmente en LVMH, que considero uno de los grandes exponentes del sector. En general, nos gusta el sector del lujo, sobre todo si China logra salir del entorno recesivo en el que se encuentra. Si desde el lado chino se implementa algún tipo de apoyo fiscal importante para superar la crisis actual, sería muy positivo para las empresas francesas de lujo.

Mejores fondos para invertir en renta variable de cara a la segunda parte de 2025

Analizando el mercado europeo por estilo de inversión, el sector value cotiza a precios más atractivos que el segmento de crecimiento. Si nos centramos en las grandes compañías de valor, como los bancos, han subido mucho, pero todavía se pueden encontrar oportunidades interesantes en el segmento de energéticas. En cuanto al crecimiento, si los tipos de interés siguen bajando en Europa y el Banco Central Europeo continúa reduciéndolos, este sector debería beneficiarse. Sin embargo, a nivel de valoración, las grandes compañías de valor resultan claramente más atractivas que las grandes compañías de crecimiento.

Mejores fondos para invertir en renta fija de cara a la segunda parte de 2025

Personalmente, me gusta mucho la renta fija americana, pero con la divisa cubierta. No creo que el dólar pueda seguir depreciándose frente al euro, pero claramente la Fed se ha quedado atrás en la bajada de tipos de interés en comparación con el Banco Central Europeo. El BCE aún tiene margen para seguir bajando los tipos, aunque la Fed dispone de mayor capacidad de maniobra. Por eso veo oportunidades especialmente en fondos de renta fija de corto plazo; estos fondos ya están anticipando el recorte de tipos de la Fed, pero aún ofrecen valor en comparación con el mercado europeo, donde los tipos ya han bajado bastante y la parte corta de la curva lo ha reflejado.

Consideramos que el BCE continuará bajando los tipos, por lo que tanto en la parte corta de la curva europea como en la estadounidense hay oportunidades. En cambio, en el largo plazo la situación es más complicada. Para ganar en ese tramo necesitaríamos señales claras de debilitamiento fuerte en las economías europea o americana, que de momento no se observan. Aunque los últimos datos de empleo han sido algo flojos, no constituyen una señal anticipatoria clara de recesión. La recesión sigue lejos según los datos duros de ambas economías. Además, el plan fiscal en Estados Unidos y los gastos en infraestructura en Europa deberían sostener unas economías que, aunque no crecen de forma robusta, tampoco muestran signos claros de recesión. Por ello, es más difícil apostar por los tramos largos de las curvas de tipos en Estados Unidos y Europa. Por tanto, de forma más conservadora, recomendaría mantener posiciones en la parte corta y media de las curvas  en Estados Unidos y Europa.