Pablo García, director general de Divacons Alphavalue destaca que, a pesar de la incertidumbre arancelaria, el mercado muestra un optimismo notable. Activos como el Bitcoin, el oro y la plata están en máximos históricos, al igual que el Nasdaq y el S&P 500.

Este optimismo se refleja en las estimaciones de resultados empresariales para el segundo trimestre en Estados Unidos, que apuntan a un crecimiento del 5,7% en los beneficios por acción. Sin embargo, Europa presenta un panorama diferente, con revisiones a la baja y una previsión de decrecimiento del 0,2% en los beneficios por acción, en parte debido a la apreciación del euro frente al dólar, que ha mermado los beneficios de las compañías europeas. Esto sugiere que Estados Unidos podría seguir superando a Europa en el rendimiento del mercado, una tendencia observada en las últimas cuatro semanas.

Desde la perspectiva de un inversor europeo que invierte en dólares, la situación cambia drásticamente debido a los movimientos de divisas. Además, los rendimientos de los bonos a largo plazo están aumentando a nivel global, lo que indica una preocupación en los mercados de bonos. Los bonos alemanes a 30 años han alcanzado su nivel más alto desde 2023, y los bonos japoneses a 30 años han marcado nuevos récords. La situación económica en Japón, con elecciones próximas, parece apuntar a un estancamiento y posible estanflación.

En cuanto a la política monetaria, los niveles de probabilidad de un recorte de tipos en Estados Unidos para septiembre han disminuido significativamente, del 94% al 60,2%, lo que indica un retraso en la reducción de tipos. Esto genera divergencias en los bonos, especialmente entre Estados Unidos y el resto del mundo. A pesar de esto, se esperan resultados empresariales brillantes en Estados Unidos, aunque la amenaza de los aranceles persiste para los países que no son Reino Unido.

En Wall Street, las expectativas han aumentado de forma moderada pero progresiva. Tras un primer trimestre excepcional con un crecimiento del 13,7% en el BPA, el mercado cotiza en función de si los resultados superan las expectativas, no solo si son buenos. En el sector bancario, se esperan resultados sólidos, pero es difícil que sigan batiendo las expectativas trimestre tras trimestre, especialmente en el margen de intereses y la rentabilidad sobre fondos propios. La solvencia es buena y la morosidad contenida, pero batir récords será un desafío.

El sector tecnológico ha sido una sorpresa positiva, con NVIDIA alcanzando máximos históricos y negociando la exportación de chips H20 con inteligencia artificial a China. Los problemas podrían surgir en Europa, con posibles decepciones debido al efecto divisa, que ya ha afectado a sectores como el químico y Ericsson.

Finalmente, el texto destaca el creciente interés de los inversores institucionales en el mundo cripto, con ETFs y fondos de criptomonedas ganando popularidad. Aunque el Bitcoin es un activo especulativo y volátil, se considera una oportunidad de inversión, especialmente ahora que los inversores institucionales han cambiado su visión y facilitan el acceso a este mercado de forma diversificada, a pesar de que el oro, un activo refugio, también esté en máximos.