El sector inmobiliario chino atraviesa tiempos difíciles. Evergrande, uno de los principales promotores del país, ha visto desplomarse sus acciones un 3% tras la noticia de la detención de varios de sus empleados por parte de las autoridades locales.
Esta noticia ha llevado a un declive en sus acciones del 24% solo en la jornada actual de la Bolsa de Hong Kong, aunque esta cifra ha conseguido moderarse conforme avanzaba el día. No obstante, el efecto dominó ha afectado a otras inmobiliarias destacadas. Country Garden, también líder en el sector, ha registrado un descenso del 2.8% en el mismo mercado bursátil, siendo evidente la repercusión de la situación de Evergrande en otras empresas del ramo.
Las razones detrás de estas detenciones todavía son objeto de especulación. Sin embargo, las autoridades han sido claras al pedir a la población que denuncie cualquier indicio de fraude relacionado con Evergrande. Las plataformas para estas denuncias son variadas: desde medios digitales hasta tradicionales. Recordemos que no es la primera vez que el gigante inmobiliario enfrenta controversias.
A mediados de 2021, se supo que empleados de la empresa habían amortizado productos de gestión de patrimonios antes de las fechas acordadas, llevando a un escándalo que desencadenó medidas disciplinarias y la posterior devolución de fondos. La situación actual parece ser la culminación de una serie de eventos desafortunados para Evergrande.
Hace tan solo un mes, la empresa se declaró en bancarrota en Estados Unidos y solicitó la protección del Capítulo 15 de la Ley de Quiebras estadounidense, en un intento por proteger sus bienes mientras se negocian acuerdos de reestructuración en Hong Kong y las Islas Caimán.
Con el panorama actual, el futuro de Evergrande parece incierto. Lo que es claro es que la Bolsa de Hong Kong, y con ella, el sector inmobiliario chino, están en alerta.
