China se encuentra mejor posicionada que la mayoría de los países, desarrollados y no desarrollados, para aguantar la “tormenta económica”. Con los amplios recursos del gobierno, y su compromiso de mantener la economía a flote, Batterymarch Financial Management (Batterymarch), filial de Legg Mason, Inc., espera que China tenga una mayor aportación al crecimiento mundial en 2009
, aunque a un ritmo menor que el año anterior.

A diferencia de otros países, China tiene los medios necesarios para aplicar medidas de estímulo económico: cuenta con dos billones de dólares en reservas de divisas; un presupuesto equilibrado, y un bajo endeudamiento. Por otra parte, el superávit comercial creció el 50% en 2008, para alcanzar la cifra récord de 457.000 millones de dólares. Este salto se debe a una fuerte disminución de las importaciones y a la caída de los precios del petróleo.

"Como usuario neto de energía, China debe seguir beneficiándose de la bajada del precio del petróleo, lo que impulsará la balanza por cuenta corriente del país y fortalecerá su flexibilidad fiscal y monetaria”, afirma Ray Prasad, Gestor Senior de Batterymarch Financial Management.

Otro de sus puntos fuertes lo constituye el sistema bancario chino que es uno de los pocos, que dentro de las economías más fuertes del mundo, sigue sin verse afectado por la crisis crediticia. Gracias a un 35% de tasa de ahorro nacional, la más alta del mundo, los bancos chinos cuentan con abundante dinero en efectivo. El ratio de préstamos sobre depósitos esta al nivel de mediados de los años sesenta y, debido a que los bancos son propiedad del estado, pueden dirigir el flujo de crédito a la economía a medida que sea necesario.

El reciente programa de estímulo económico puesto en marcha esta dirigido a empresas controladas por el Estado, particularmente a aquellas centradas en el desarrollo de infraestructuras. Estas compañías, que representan un tercio de la producción industrial del país, tienen “la orden” de mantener sus actuales niveles de gasto y empleo.

"Tener una economía robusta ayuda a promover la estabilidad política, lo que es particularmente importante para China en 2009, ya que en este año se conmemora el aniversario de varias protestas populares que en su día tuvieron mucha repercusión internacional.” añadió Prasad.

El desafío que afronta China es lograr el equilibrio justo entre los ingresos fiscales y los gastos en los próximos meses, sobre todo si la economía oscila entre la inflación y la deflación. Al igual que en otros países, este año la evolución de la economía China dependerá en gran parte de la confianza de los consumidores.

Ray Prasad espera que aguanten la situación aquellas empresas que, en los criterios cuantitativos de Batterymarch estén situados en las primeras posiciones así como recomendaciones positivas y creciendo del consenso de mercado, con rentabilidad por dividendo y con una valoración atractiva en relación con su historia reciente. El modelo de Batterymarch también se dirige a valores con “momentum” a corto plazo.

"Nuestra análisis indica que estas medidas son las que mejor predicen el exceso de retorno en China. Las empresas que cumplen con estos criterios son normalmente grandes empresas con una gestión de calidad, que desarrollan infraestructuras y cuentan con consumidores locales. Creemos que empresas como éstas tienen los ingredientes para el éxito en una larga recesión económica", concluyó Prasad.

Batterymarch Financial Management es un administrador de inversiones que utiliza estrategias cuantitativas para invertir en los mercados mundiales. Batterymarch tiene oficinas en Boston y Londres. Sus activos bajo gestión ascendían a un total de 16.600 millones de dólares a 31 de diciembre de 2008. Batterymarch es una filial que pertenece a Legg Mason, Inc.