Su capacidad de innovación les convierte en unos socios privilegiados para las empresas de mayor capitalización. Sin embargo, a pesar de su importancia en la economía y de las ventajas que presentan (posicionamiento de nicho de mercado, capacidad de adaptación, exposición internacional, balance sólido…), rara vez son la primera opción de inversión de los partícipes y, sin embargo, al contrario