Primero, como decíamos antes, los hechos. El VIX se encuentra en zona de mínimos, en niveles de 12 puntos que habría que remontarse a febrero del año 2007 para encontrar la primera referencia similar.
Ahora bien, los expertos apuntan a un cambio de tendencia sino inminente, sí bastante cercano. José Luis Martínez Campuzano, estratega jefe de Citigroup, reconocía estar “inquieto” por un VIX “en mínimos” y reconocía que los inversores deberían preguntarse si no “existe un exceso de confianza en el mercado y también respecto a los bancos centrales, cargados de activos”.


Desde Enbolsa.net recomiendan usar la comparativa S&P 100, o lo que es lo mismo los valores de mayor capitalización del índice norteamericano, respecto al índice de volatilidad… ¿y el resultado? Ya empieza a “mostrar divergencias bajistas”. “Se ve claramente cómo el VIX se encuentra en zona de volatilidad extrema mínima”, afirman los expertos que ven en esa diferencia entre indicadores “un claro síntoma de debilidad”. (Ver gráfico con especial atención a los meses de marzo y septiembre/octubre de 2012)

GRÁFICO VIX &S&P 100 (FUENTE: ENBOLSA.NET)


En el último trimestre, el VIX ha retrocedido más de un 22% frente a una revalorización superior al 10% del S&P 500. Luego un incremento de volatilidad significaría lo contrario. “Se producirá una bajada de los mercados y ese retroceso podría estar cada vez más cerca”. De hecho, el aspecto fundamental de los mercados reafirmaría esta teoría ligado a la incertidumbre –perenne y constante en nuestras vidas últimamente-, según comentaba Álvaro Lissón, analista independiente. En todo caso, desde Renta 4, hablando del ‘presente’ recomiendan “no comprar ETFs de volatilidad” mientras el S&P 500 aspire a cotas más altas sumado a “tendencias bajistas duraderas” del VIX que provocan, en su opinión, “un goteo a la baja”.


Futuro volátil
Hay quien, por ejemplo, ya da por hecho que vivimos en un entorno de volatilidad creciente, a pesar de los gráficos como es el caso del director de Análisis de Estrategias de Inversión, Luis Francisco Ruiz. El Banco Santander ha sido el último activo en entrar en nuestra cartera, aunque la mirada se centra en “una aproximación a 6,57 nos concedería margen en el actual entorno de volatilidad para ajustar el stop inicial”. (Ver: ¿Cómo queda el Santander en España?)

Otra entidad en el punto de mira de la volatilidad es Bankinter. Nicolás López, de M&G Valores, asegura que, en su caso, es verdaderamente “grande” con “movimientos muy fuertes tanto en las subidas como en las bajadas”, de ahí que recomiende mucha precaución para los inversores con esta entidad.

Lo cierto es que, no en este grado, pero el consenso de analistas apunta a un repunte de la volatilidad en el muy corto plazo. Alberto Castillo, analista jefe de Capital Bolsa, tiene claro que “en el corto plazo se debe asumir volatilidad y un movimiento lateral” para todo aquel que quiera invertir dentro del Ibex 35. Técnicas Reunidas, Pescanova y Repsol son sus apuestas teniendo en cuenta este escenario.

En el extremo contrario se encuentran las commodities. Tal es el caso del oro si atendemos a las declaraciones de Michael Widmer, estratega de metales de Bank of America Merrill Lynch para la cadena estadounidense CNBC, en las que aseguraba que “no sería extraño” que el precio de la onza de oro “bajara otros cien dólares”. En este sentido, contradice en parte a aquellos analistas que apuntan a un repunte de su cotización en base a la teórica ‘guerra de divisas’.

La segunda commodity en discordia es el petróleo. “Sabemos que es habitual que tras períodos de gran volatilidad, como la que ha vivido el precio del petróleo entre los años 2007 y 2009, suele llegar la tranquilidad”, asegura Rubén J. Ullúa, asesor y analista de mercados financieros. Su pronóstico vaticina una “estabilización de los precios” para “calmar los ánimos”.


¿Qué estrategia seguir?
Proponemos tres estrategias a seguir considerando muy probable un repunte del índice de volatilidad. La primera de ellas, la más básica quizás, viene planteada por Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG Markets, al hablar de entrar “largos” sobre el VIX “si Estados Unidos se mantiene” dado que “es difícil que el índice caiga más”.

Segunda estrategia: bonos convertibles. “Si hay repuntes de volatilidad, podemos beneficiarnos de ella”, asegura Javier Monjardín, director de Análisis de Tressis, teniendo en cuenta que “tradicionalmente, los bonos convertibles han tenido un comportamiento asimétrico” respecto al movimiento del mercado, esto es, “han captado un 75% de las subidas de la renta variable cuando sólo han reflejado un tercio de las caídas”.

En este sentido, la gestora Lyxor Asset Management viene a confirmar la hipótesis contraria, según el barómetro correspondiente al mes de enero, en el que asegura que “la baja volatilidad fue perjudicial para las estrategias de convertibles”.

En último término, tercera estrategia: fondos de inversión. Álvaro Lissón considera que, en entornos de volatilidad, una buena estrategia sería centrarse en “fondos de estrategia long/short, que apuestan por el distinto comportamiento de activos” y no de índices. Casos concretos son, en su opinión, el Amundi Absolute Volatility World Equities, que “gestiona la volatilidad”, mientras que siguiendo la estrategia anteriormente propuesta, el experto recomienda “el fondo de renta variable europea” BlackRock European Absolute Return.