“Aquellos que fueron previamente bajistas y se han convertido en alcistas recientemente serán mucho más sensibles a la futura volatilidad de precios”, asegura en su comentario semanal Gianni Hirschmüller, analista del Deutsche Börse Group. Una situación que, en todo caso, no espera que permanezca por mucho más tiempo. El porcentaje de ‘bajistas’ ha caído hasta representar el 18% del total, diez puntos por debajo respecto a la semana anterior, y lo que amplía la brecha respecto a los ‘alcistas’ hasta en un 46%.
“Es el nivel más bajo del año. Malas noticias, en todo caso, que hicieron su decisión sobre comprar más fácil”.

La cuestión es que son seis semanas consecutivas en las que el optimismo de los gestores de fondo alemanes no cesa en su escalada y alcanzan un 64% del total. “Me resulta difícil pensar que con este sentimiento tan alcista, las bolsas sigan subiendo. No creo en el sentimiento alemán, salvo por la teoría de la opinión contraria”, asegura José Luis Cava, analista independiente de la Zona Premium.

Ligando directamente el sentimiento inversor con el movimiento del Dax Xetra germano, cuesta pensar en tanto nivel de alcistas cuando el selectivo alemán no ha sido capaz de romper siquiera el nivel del 7.400. "La gente es alcista aún no habiendo superado la resistencia”, afirma Cava que pronostica una corrección postrally alcista a partir de este mismo martes. Según el experto, si se mantiene por debajo de los 7.250 enteros, el riesgo bajista es evidente. La superación del 7.500 daría alas para pensar en los 7.850 puntos.

De forma concreta, Darío Redes en su blog ‘Entendiendo el trading’ asegura que “un quiebre por encima de los 7329.5 puntos al cierre, indicaría una aceleración al alza”, mientras que la tendencia a la baja vendría marcada por “la ruptura por debajo de los 7318.0 puntos”.


Con tal nivel de alcistas, ¿es necesario capitular?

Lo repite Cava semanalmente, pero resulta que ‘hacer capitular a los alcistas’ parece requisito indispensable para formar un suelo en los mercados. Es lo que comúnmente se llama ‘meter miedo en el cuerpo’, en este caso, en el de los toros de las bolsas. “Pensamos que al escenario correctivo todavía le queda otra pata”, asegura Luis Francisco Ruiz, director de Análisis de la Zona Premium. En su opinión es necesaria esa capitulación que “precede a un suelo de mercado”. Además, introduce dos variables fáciles de comprobar: la volatilidad y el volumen. Respecto al índice de volatilidad, es sabido por todos que no se encuentra en ningún extremo que pudiera hacer pensar siquiera en un fracaso, para empezar, del acuerdo sobre el techo de gasto estadounidense. A ello se suma el escaso volumen de negociación que por poner el ejemplo más reciente, superó ligeramente los 500 millones de euros en el Ibex 35 a cierre de este lunes.

No hay fuerza para conquistar nuevas cimas y reflejo de ello es el gráfico lateral que presenta el selectivo nacional. “Son once semanas consecutivas desde que se iniciara el rango lateral”, afirma el experto y la salida de él no es necesariamente halagüeña.

Hay dos aspectos que preocupan en estos momentos a los inversores internacionales. Aquel que podría llevar a la pérdida de soportes es una dilación en el tiempo del acuerdo respecto al ‘fiscal Cliff’ estadounidense. Y, por otro lado, aquel que podría marcar nuevos máximos en los mercados. Habrá un rally alcista si finalmente la eurozona alcanza un acuerdo y Barack Obama coopera en su terreno, afirman los expertos de Serenity Markets. Si se cumple el pronóstico, Daniel Pingarrón, estratega de mercados de IG Markets, vaticina un final de año “muy alcista para el Ibex 35 y el índice de Atenas (Athen Index Composite)” que, en el último medio año, ha duplicado prácticamente su valor.