Nos adentramos en la última semana de agosto y el Ibex lo único que ha sido capaz de hacer es volver al nivel al que comenzó el mes. ¿Qué futuro le espera para los próximos días?
“Efectivamente, el verano se ha caracterizado por una corrección que suele darse en estas fechas, pero nuestra opinión es que esta corrección está llegando a su fin y por este motivo llevamos más de una semana incrementando el riesgo en nuestras carteras.


Seguimos pensando que a medio y largo plazo la tendencia de la renta variable seguirá siendo positiva. Es un buen momento para adoptar el riesgo o retomar o tomar posiciones nuevas”.


¿Podría decirse que todo seguirá sin grandes sorpresas mientras el Dax se mantenga en los ‘bajos’ niveles actuales?
“Podría continuar la volatilidad pero más bien debido a la tensión geopolítica actual siendo un cóctel bastante peligroso, con riesgo sistémico para los mercados.”

¿Por qué valores nacionales apostaría dentro de una tendencia alcista?
“En las primeras fases de un ciclo económico de recuperación, los valores que más destacan son los bancos y el sector constructor y así ha sido dentro del Ibex. Dado lo incipiente de la recuperación seguimos apostando por ambos sectores”.

¿Es momento de plantearse cortos en algún título del selectivo?
“No lo recomendaríamos para ningún valor”.

Dentro del mercado de bonos, la rentabilidad de la deuda pública española sigue disminuyendo de manera considerable y se mantiene en mínimos históricos. ¿Observa alguna oportunidad en algún otro bono público?
“Por ejemplo, los bonos portugueses, aunque los estamos abandonando ya para comprar bonos de Grecia y como novedad de hace menos de una semana también bonos de Brasil”.

¿Y de empresas? ¿Se ha producido últimamente alguna emisión de deuda corporativa interesante?
“Este verano no hay nada destacable”.