El consorcio Yum! Brands, propietario de las cadenas de comida rápida KFC, Pizza Hut, Taco Bell y The Habit, obtuvo un beneficio neto de 1.575 millones de dólares (1.377 millones de euros) en el conjunto de 2021, lo que supone un incremento del 74% respecto de las ganancias que contabilizó durante el año anterior, según se desprende de la cuenta de resultados que ha presentado este miércoles la compañía.

La facturación de la firma entre enero y diciembre fue de 6.584 millones de dólares (5.759 millones de euros), un 16% más. Los ingresos procedentes de los restaurantes en régimen de explotación directa fueron de 2.106 millones (1.842 millones de euros), un 16% más, mientras que las comisiones y alquileres cobrados a los franquiciados supusieron unos ingresos de 2.900 millones (2.536 millones de euros), un 16% más. Las aportaciones de las franquicias a la publicidad crecieron un 18%, hasta 1.578 millones (1.380 millones de euros).

Las ventas "sistémicas" de todas las marcas, incluyendo la facturación de las franquicias que no se incluyen en las cuentas al ser empresas independientes, crecieron un 9% en 2021, hasta alcanzar los 57.600 millones (50.382 millones de euros).

En el conjunto del año, los gastos de los locales propios fueron de 1.725 millones (1.509 millones de euros), un 15% más, mientras que el coste de la publicidad de las franquicias fue de 1.576 millones (1.378 millones de euros), un 20% más. Los gastos generales y administrativos se mantuvieron sin cambios en 1.060 millones (927 millones de euros).

Únicamente en el cuarto trimestre del año, el beneficio neto de Yum! Brands se situó en 330 millones de dólares (289 millones de euros), la misma cifra que un año antes. Al tiempo, la facturación entre octubre y diciembre alcanzó los 1.890 millones (1.653 millones de euros), un 8% más.