Uno de los tópicos centenarios de la bolsa es hablar de manos fuertes y manos débiles. Las manos fuertes son aquellas que manejan grandes volúmenes de dinero con capacidad de mover el mercado y que cuentan con la mejor información sobre la futura evolución de los precios. Por contra, las manos débiles hacen referencia a los inversores particulares, aquellos con cuentas pequeñas que disponen de poca información y son pasto para los tiburones que "juegan" con ellos a su antojo.

Los mercados han evolucionado mucho y la tecnología ha dado acceso al inversor particular a herramientas profesionales e información gratuita para poder posicionarse en el mercado con mayor fiabilidad. Utilizando técnicas de inversión profesionales y limitando el riesgo con una correcta gestión monetaria es posible ganar y ver cómo crece su patrimonio de forma consistente.

Entre los grandes errores que comete el inversor particular o la mano débil está pretender que el mercado le dé la razón. Primero se posiciona en un valor y después espera a que la cotización haga lo que él quiere. Pero todos sabemos que esto no funciona así y que en más de una ocasión acabará "pillado" con una pérdida que no le permitirá vender los títulos. Permanecerá enganchado varios años hasta que, en el mejor de los casos, pueda recuperar parte de la inversión inicial. 

El inversor actual debe ser dinámico, debe moverse con el mercado y tomar decisiones utilizando la información disponible, las herramientas y técnicas de inversión profesionales. Y no nos referimos a que tenga que realizar multitud de operaciones, sino a que debe tener un plan de trading adaptado a su forma de invertir y revisarlo con frecuencia para determinar si tiene que tomar alguna decisión. La formación en mercados financieros es crucial: situarse en punto correcto del ciclo de mercado, analizar en qué mercados está la fuerza, los sectores líderes, los valores con más probabilidad de acierto, el momento de entrar y salir de un activo... todo ello enmarcado en una metodología determinada y acorde con los objetivos personales del propio inversor, harán que la probabilidad de éxito se dispare y deje de ser pasto de los tiburones.

En nuestro Máster Práctico de Inversión y Trading para el Particular vemos en profundidad las técnicas que hoy funcionan, las que utilizan los inversores más importantes del mundo.Durante ocho meses y con profesores especialistas recorremos todos los mercados, productos y estrategias pasando por supuesto por el psicotrading, otro aspecto fundamental que debe estar controlado para que las emociones no jueguen en contra.

La opinión de los antiguos alumnos es muy satisfactoria. Han mejorado notablemente su modo de operar y sus resultados, utilizando plataformas gráficas profesionales (de uso gratuito) para realizar análisis técnico y tomando las mejores fuentes de información para el análisis macroeconómico y fundamental.

El programa es eminentemente práctico, avanzando en su contenido en función de la decisión que debe tomar un inversor en cada momento: estratégica, táctica y operativa. Realizamos multitud de simulaciones y casos prácticos reales para que el alumno ponga en práctica todo lo explicado por los profesores en las clases, que son en directo y quedan grabadas para su posterior consulta.

Todavía quedan plazas para la próxima edición que comienza el 2 de octubre. Matricúlate ahora y aprovecha el descuento hasta el 15 de septiembre. ¿Quieres más información?