Unicaja reforzó su posición como una de las entidades más solventes del sistema financiero español al cierre del tercer trimestre del ejercicio, como reflejan los indicadores de capital, morosidad y rentabilidad, lo que es especialmente relevante en las presentes circunstancias de incertidumbre económica.

Así, una situación claramente positiva presenta el coeficiente de capital básico o "core capital" de la entidad, que creció hasta el 13,4% a Septiembre, con una mejora interanual de 1,40 puntos. Por su parte, la ratio de morosidad se situó en el 3,06% a esta fecha lo que supone una de las más bajas del sistema financiero español, y que viene mostrando una acusada estabilidad en los últimos trimestres. La tasa de cobertura de la morosidad es del 130%, la más alta dentro del sector. El beneficio neto consolidado ascendió a 150,3 millones de euros.

En todo caso, el fin esencial de la entidad en este año es mantener unos sólidos niveles de fortaleza y solvencia financiera, aspectos estos a los que se han subordinado otros posibles objetivos.

La cuenta de resultados mostró como datos más favorables la fuerte capacidad de generación de ingresos recurrentes, a pesar de la disminución de los márgenes de negocio, y la contención (de hecho, pequeña caída) de los gastos de explotación. La presión de los tipos de interés sobre los márgenes, el mantenimiento de unas fuertes provisiones (204 millones de euros) en consonancia con la habitual política de prudencia de la entidad y destinadas a reforzar el balance y los menores ingresos extraordinarios, determinaron, no obstante, una caída de beneficios en línea con la tendencia general del sector. El beneficio neto consolidado de Unicaja ascendió a 150,3 millones de euros a Septiembre, lo que representa una disminución del 36,9% en tasa interanual. Algo más de la mitad de esa reducción se debió a los menores resultados extraordinarios alcanzados en el presente ejercicio por comparación con el anterior.

Tanto los resultados obtenidos como los sólidos parámetros de solvencia ratifican los datos y proyecciones de las estimaciones de las pruebas de "stress" realizadas este año, y que confirman a Unicaja como una de las cinco entidades financieras españolas que cumplirían sobradamente los nuevos y más exigentes requisitos de solvencia, aun dentro del escenario económico más pesimista de los considerados.

CUENTA DE RESULTADOS CONSOLIDADA DE UNICAJA AL CIERRE DEL TERCER TRIMESTRE DE 2010

 

De otra parte, la entidad mantiene una posición neta de liquidez de 2.378 millones de euros (aproximadamente un 7% del balance), ello sin incluir la emisión de cédulas hipotecarias realizada al mercado en Octubre por 750 millones de euros.

El activo total alcanzó una cifra próxima a los 35.000 millones de euros, con un moderado aumento del 0,8%, y los fondos propios, a su vez, superaron los 3.000 millones de euros, lo que representa un 8,6% del balance. El volumen de negocio (créditos más recursos) sumaba algo más de 57.000 millones de euros, con una disminución anual del 3%.