El doctor Francisco Javier Cambronero Santos es jefe de Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud San José (Madrid) y especialista en suelo pélvico. Recuerda que el suelo pélvico, hablando estrictamente, se compone de todas las estructuras músculo-ligamentosas que cierran el anillo inferior de la pelvis menor ósea. “Frecuentemente se habla de ello incluyendo todas las vísceras que contiene la pelvis, lo cual no es del todo correcto”, advierte.
Además, avisa de que su cuidado no sólo debe afectar a las mujeres, dado que los hombres también cuentan con suelo pélvico: “El hombre tiene las mismas estructuras anatómicas que la mujer. Únicamente cambian algunos aspectos de la anatomía en el sistema reproductor”.
PRINCIPALES FUNCIONES
Así, explica que la función principal del suelo pélvico es la de sujetar y mantener la anatomía de todas las vísceras contenidas en la pelvis, para su correcta función fisiológica. “Es un ‘todo’ interconectado donde están involucrados los huesos, los músculos, los tendones, los ligamentos, las fascias, y donde se desarrollan tres funciones muy importantes como son: la micción, la defecación y la reproducción, incluyendo toda la sexualidad orgánica”, detalla este experto.
Con ello, destaca este urólogo, los síntomas de sospecha por los que consultar con un especialista son muy variados, si bien hay preguntar cuando se alteran las tres funciones viscerales, “como hemos dicho el almacenaje de orina y vaciado en la vejiga, la defecación, y las funciones sexuales y reproductivas”. Por otro lado, remarca que el dolor es un síntoma frecuente, y por el que también se debe consultar en caso de sospecha.
LOS 4 PRINCIPALES PROBLEMAS EN EL HOMBRE
En cuanto a los problemas que principalmente suelen darse en el suelo pélvico del hombre, el doctor Javier Cambronero Santos, jefe de Servicio de Urología del Hospital Quirónsalud San José (Madrid), apunta a los siguientes:
• La hiperplasia benigna de próstata: provoca una obstrucción al vaciado vesical, siendo necesario en ocasiones el tratamiento farmacológico, o la cirugía desobstructiva.
• La vejiga hiperactiva: problema funcional de la vejiga que aumenta la frecuencia y la urgencia a la hora de miccionar; tratándose con fármacos, o con inyección de Botox.
• La prostatitis: problema inflamatorio o infeccioso de la próstata, que se trata con antibióticos y tratamientos multidisciplinares en el caso de su cronificación.
• La incontinencia urinaria de esfuerzo masculina: normalmente viene de una lesión esfinteriana por cirugía o por problemas neurológicos; se pueden aplicar tratamientos farmacológicos, pero casi siempre la solución es quirúrgica, y con el implante de alguna prótesis antiincontinencia, o un esfínter urinario artificial.
En este sentido, el doctor mantiene que los principales problemas en el suelo pélvico del hombre pueden aparecer en la población joven, donde es más frecuente ver prostatitis, siendo el resto de problemas más incidentes según aumenta la edad, sobre todo a partir de 50-60 años.
LA PREVENCIÓN ES LA CLAVE
“En el día a día para que un hombre cuide de su suelo pélvico no existen medidas claras a seguir. La más importante, sin duda, es consultar al especialista cuando aparecen los primeros síntomas, y a partir de los 45 años (40 si hay antecedentes de cáncer prostático familiar) hacer revisiones regladas en Urología”, defiende este experto del Hospital Quirónsalud San José.
Aunque, obviamente, todo depende de la patología, este urólogo especialista en suelo pélvico celebra que hoy en día hay numerosos tratamientos destinados a paliar las afecciones del suelo pélvico en hombres, desde fármacos específicos, hasta diversas cirugías.
“Los tratamientos puede aplicarlos un urólogo, aunque en ocasiones pueden ser soluciones terapéuticas multidisciplinares, donde el urólogo se asocia con el fisioterapeuta, con las unidades de dolor, o por ejemplo con los expertos en coloproctología, entre otras especialidades”, resuelve el doctor Cambronero Santos.