De esta cifra, el 85% de la financiación se ha destinado al segmento empresarial. A autónomos, pymes y grandes empresas, Bankia otorgó entre enero y septiembre 10.784 millones de euros de nuevo crédito, un 55,4% más. Mientras, a financiar operaciones de consumo de familias se destinaron 874 millones, un 39,4% más. La entidad ofrece periódicamente estos datos en la web http://darcuerda.bankia.com/es/.
El consejero delegado de Bankia explicó que el sector privado español está reduciendo su volumen global de endeudamiento, lo cual es compatible con que el nuevo flujo de financiación esté creciendo. En el segmento de empresas, por ejemplo, el avance del nuevo crédito es del 14%, y en préstamos al consumo del 20%. En ambos casos, destacó Sevilla, “Bankia está creciendo por encima del sector, lo que nos está permitiendo ganar cuota de mercado en los dos segmentos prioritarios para el banco”.
El consejero delegado de Bankia repasó el entorno que vive el sector financiero, en el que “los bajos tipos de interés hacen que el control de costes y el coste del riesgo sean más importantes que nunca”.
En materia de costes, José Sevilla explicó que Bankia tenía al cierre del primer semestre del año un ratio de eficiencia recurrente (excluidos los resultados por operaciones financieros) del 44,4%, “el más bajo entre los bancos nacionales”. “El volumen de gastos sobre activos gestionados está también muy por debajo de nuestros principales competidores”, añadió.
Por el lado del control de riesgos, el consejero delegado de Bankia indicó que en los 18 meses transcurridos entre el cierre de 2013 y junio de 2015, Bankia ha conseguido reducir el saldo de créditos dudosos en 4.700 millones de euros, al tiempo, además, que incrementaba la cobertura de los saldos que permanecen en balance.
Esta evolución ha permitido que el coste del riesgo, medido por el volumen de provisiones sobre el saldo de crédito, haya bajado de 74 puntos básicos en 2013 a 51 puntos básicos en el segundo trimestre de este año, en línea con el objetivo que Bankia se había marcado en su Plan Estratégico 2012-2015.
Una mejora de la calidad del balance que ha ido acompañada, por un lado, de un refuerzo de la solvencia de Bankia, que desde finales de 2012 ha incrementado en 449 puntos básicos, del 6,82% al 11,31%, su ratio de capital de primera calidad en términos fully loaded, esto es, anticipando los requerimientos que exigirá a finales de esta década la normativa de Basilea III.
Y, por otro lado, de un avance de la rentabilidad sobre fondos propios, que ha pasado del 5,9% en 2013 al 9,8% al cierre del primer semestre de este año, lo que sitúa al banco en la senda de cumplir el objetivo del 10% fijado para finales de 2015.
Sevilla también ahondó en la “profunda revisión” que debe hacer la banca del modelo de distribución, teniendo al cliente como objetivo para ofrecerle “una mayor calidad de servicio” y “una auténtica aproximación multicanal”.