Este lunes, la cotización del yen japonés experimentó una significativa caída hasta alcanzar su nivel más bajo en casi 34 años frente al dólar. El cruce del dólar frente a la moneda nipona se situó en 154,46 yenes por cada dólar, marcando el peor cambio desde junio de 1990. A pesar de las advertencias y posibles intervenciones compradoras por parte de las autoridades, el yen continúa su tendencia bajista.

Los datos de inflación en Estados Unidos, que se ubicaron en un 3,5% en marzo, por encima del 3,2% de febrero, han desempeñado un papel crucial en la depreciación del yen frente al dólar. Estas cifras han alejado las expectativas de una posible reducción de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal, lo que ha contribuido a la debilidad del yen.

A pesar de que el Banco de Japón recientemente anunció su primer incremento del precio del dinero en 17 años, poniendo fin a la era de tipos negativos, la situación actual del yen sugiere que el BOJ podría considerar medidas adicionales para contrarrestar su depreciación. El mantenimiento de condiciones financieras acomodaticias parece ser la postura actual del banco central japonés.

En resumen, la caída del yen frente al dólar debido a los datos de inflación en EE. UU. plantea desafíos para la economía japonesa y señala la importancia de monitorear de cerca la evolución de las políticas monetarias y los indicadores económicos internacionales.

Impacto de la inflación en EE. UU. en la cotización del yen

Reacción del Banco de Japón