RESULTADOS
El ejercicio 2011 ha sido complicado para el negocio bancario. Durante todo el año la debilidad económica ha sido persistente, y en la segunda parte del mismo nuevas incertidumbres han dado lugar a un escenario de fuertes tensiones y elevada volatilidad en los mercados. A lo largo del año, la morosidad en el sistema ha mantenido su tendencia al alza y las tensiones de liquidez han provocado un aumento generalizado de los costes de la financiación mayorista.

El margen de intereses ha alcanzado los 1.454,9 millones, un 12,4% menos que el año anterior, variación que refleja el impacto de la menor actividad en el negocio y del aumento de los costes de financiación que, no obstante, se ha limitado gracias a la gestión de precios y de balance desarrolladas.

La gestión y vinculación de clientes ha supuesto un aumento de la transaccionalidad, mejorando nuestra cuota en el SNCE en un 3,7%., y un crecimiento de la utilización de servicios de valor añadido, que se ha traducido en un avance de los ingresos por servicios del 2,6% hasta los 538,6 millones de euros. Las comisiones procedentes de fondos de inversión y pensiones han sido de 77,4 millones de euros, un 16,4% menos que en 2010, debido a la bajada de la comisión media y la elección por los clientes de otros productos de colocación de sus ahorros. Con todo ello, las comisiones netas se han mantenido prácticamente en los niveles del año anterior, y han ascendido a 616,0 millones de euros.

La situación de los mercados en la segunda parte del año ha incidido en los resultados de operaciones financieras; por una parte, por resultados negativos de valoración de activos y, por otra, por la reducción de la actividad de los clientes. Con todo ello, en 2011 estos resultados han supuesto 119,2 millones de euros, un 21,0% menos que el ejercicio precedente.

Fruto de esta evolución, el margen bruto generado en 2011 ha sido de 2.234,9 millones de euros, un 10,2% menos que el año anterior.

El objetivo de control de la eficiencia es clave en el entorno presente. Gracias a la gestión llevada a cabo en 2011, los costes de explotación han sido de 963,8 millones de euros, un 2,5% menores a los incurridos en el año anterior. La ratio de eficiencia se ha situado al cierre de 2011 en el 43,1%, indicador que a lo largo de todo este año está siendo el mejor entre los bancos españoles.

El margen neto de explotación de 2011 ha ascendido a 1.271,1 millones de euros, un 15,4% menos que en 2010.

Las dotaciones para insolvencias han ascendido en 2011 a 660,7 millones de euros, frente a 399,9 millones en 2010. Esta evolución es consecuencia de unas menores necesidades de dotaciones específicas durante el ejercicio que han sido de 818,8 millones de euros, frente a 1.300,2 millones en 2010, y a una menor utilización de provisión genérica, 118,1 millones en 2011 frente a 864,0 millones utilizados el año anterior, pues actualmente ya se sitúa en el mínimo normativo del 10%.

Por otra parte, se han generado beneficios extraordinarios por 194 millones de euros, de ellos 116 millones por reordenación y venta de participadas y el resto por resultados de operaciones financieras y por venta de oficinas, y se han realizado dotaciones por 237 millones de euros, básicamente para activos inmobiliarios adquiridos.

Adicionalmente, y ante la evolución del mercado inmobiliario se ha constituido una provisión especial y voluntaria de 400 millones de euros, reforzando de esta manera la solidez patrimonial del Banco.

Se han realizado por tanto en el ejercicio dotaciones por un total de 1.298 millones de euros.

Resultante de todo esto el beneficio neto atribuible ha sido de 125,1 millones de euros, un 72,8% menos que el año anterior.

BALANCE
Los recursos de clientes del sector privado residente ascienden al 31 de diciembre de 2011 a 53.360 millones, un 9,8% inferiores a los de hace un año. Esta bajada responde a la política del Banco de renovación parcial de los depósitos captados en la campaña especial lanzada en el segundo trimestre de 2010. Excluida esta operación la variación interanual es del -2,3%.

En 2011, la inversión ha seguido una tendencia a la baja, consecuencia de la débil demanda de crédito y del entorno de mayores riesgos de crédito y liquidez. Al cierre de 2011 se ha situado en 69.225 millones de euros, un 8,6% menos que hace un año, evolución similar a la del sector.

Esta debilidad del entorno y la propia caída de la inversión ha provocado que la tasa de morosidad haya seguido subiendo en 2011 hasta el 4,94%. En todo caso, el incremento de los créditos en mora en el ejercicio ha sido únicamente de 402 millones de euros, y al acabar el año ascienden a 3.944 millones de euros. La cobertura con provisiones es del 52,7%.

En cuanto a la situación de liquidez, los activos líquidos disponibles permiten afrontar con comodidad los vencimientos de financiación mayorista de 2012, que ascienden a 5.200 millones aún sin nuevas emisiones de deuda.

Durante el ejercicio 2011, la gestión de la liquidez se ha apoyado en la mejora del gap comercial, que ha permitido reducir la financiación mayorista en 5.600 millones de euros.

El nivel de capitalización del Banco ha mejorado de manera orgánica, y se encuentra por encima de los mínimos exigidos, con un exceso de capital sobre estos requerimientos de casi 1.600 millones. Al 31 de diciembre de 2011 la Ratio BIS es del 10,65%, y el core capital del 9,02%, con una mejora de 0,71 pp en el año.