MADRID, 05 DIC. (Bolsamania.com/BMS) .- El estilo de Draghi es innegable. Antes de su rueda de prensa habitual tras la decisión de tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE), la última de este año, el mercado bromeaba con la previsible inacción de la autoridad monetaria del Viejo Continente tras reducir el precio del dinero hace un mes. Ironizaban con que el presidente se limitaría a felicitar las próximas fiestas de Navidad, y Mario Draghi ha iniciado su comparecencia con un “para empezar, les deseo a todos Feliz Navidad” acompañado de risas.
No se ha repetido la sorpresiva bajada de tipos de noviembre, lo cual era más que obvio, pero Draghi tampoco ha puesto sobre la mesa medidas que sí se especulaban, como reducir los tipos de interés para los depósitos bancarios a tasas negativas o nuevas inyecciones de liquidez para la banca, otra LTRO. Sobre la primera ha reconocido que se ha debatido “un poco” y, en cuanto a la segunda, no sólo no la ha descartado para el futuro, sino que ha dado por buenas las especulaciones sobre que, de haber una nueva LTRO, estará condicionada a que las entidades abran el flujo del crédito: “Nos queremos asegurar de que el dinero llega a la economía real, de que la operación no sirve para subvencionar la formación de capital de los bancos a través de operaciones de carry trade (compra de deuda soberana de elevada rentabilidad con dinero obtenido a tipos bajos)”.
Draghi ha reiterado el “estamos preparados y somos capaces de actuar”, y ha definido como “poderosa artillería” a los instrumentos que aún pueden emplear, aunque de momento son “para mañana”. “En pocas palabras, el BCE se sitúa en modo 'esperar y ver' después del recorte de tipos de noviembre. Draghi ha dicho claramente que el nivel de incertidumbre es ahora menor que en 2011 y ha defendido que el BCE se permita el lujo de realizar una evaluación más clara de cuáles son los efectos de su política”, ha opinado en The Guardian Annalisa Piazza de Newedge Strategy.
Las bolsas se han despedido de Draghi hasta el año que viene con más caídas: en general, con descensos del 0,9% de media en Europa, y en concreto, con pérdidas del 1,56% en el Ibex 35, que mañana partirá desde los 9.392,10 puntos. “Más caídas” porque las plazas europeas suman su peor racha desde hace cinco meses, aunque “desde finales de junio, vivimos en un continuo rally”. El analista técnico de Bolsamanía, José María Rodríguez, se queja hoy de la importancia que siempre se da al famoso rally de Navidad. Tras una subida desde junio del 25%-30%, Rodríguez confiesa que le da igual el rally de Navidad. “Lo que importa es que los mercados europeos son alcistas siempre que miremos en el medio y largo plazo”, explica, y concluye: “Si en el corto plazo 'pintan bastos', mala suerte. Bueno, mala suerte para aquellos que entraran tarde en el mercado. Aunque, si saben esperar, tendrán su recompensa”.
Hoy, además, tampoco ha ayudado a darle la vuelta a varias sesiones de caídas un dato de PIB en Estados Unidos mejor de lo esperado. Porque sí, el “bad news, good news” pero a la inversa, es decir el “buenas noticias, malas noticias” ha vuelto por Navidad. La primera economía del mundo ha publicado su mejor crecimiento desde 2012, lo que acerca el final de los estímulos de la Reserva Federal (Fed), el famoso tapering. Para saber más sobre si el temido “principio del fin” está de verdad más cerca del marzo de 2014 que vaticinan la mayoría de los expertos, la siguiente cita es ya mañana, cuando se publicará el Informe de Empleo del mes de noviembre en Estados Unidos. Una referencia clave para la Fed y que se publicará con España de fiesta, aunque con la bolsa operando con normalidad, así que “feliz puente” a quienes lo vayan a disfrutar. Para desear Feliz Navidad aún tendremos que esperar.
María Gómez