De las conclusiones del estudio se desprende que este miedo se da más en los hombres (31%) que en las mujeres (26%), y que también es mayor entre los jóvenes de entre 18 y 24 años de edad (44%), que en el caso de los profesionales de entre 45 y 54 años de edad (14%).

Los trabajadores que están más cerca de la jubilación muestran una de las tasas más altas por edades, ya que un 25% reconoce que existe la posibilidad de perder su actual empleo bajo la actual coyuntura económica. Por otro lado, los trabajadores más preocupados por su estabilidad laboral son los que cuentan con estudios universitarios (30%), mientras que en el lado contrario se encuentran aquellos profesionales que cuentan con un nivel formativo bajo.