Si bien no hemos contado con el anuncio de nuevas medidas, el presidente Mario Draghi sorprendía al mercado al asegurar que los tipos de interés se mantendrán en el nivel actual o incluso por debajo durante un largo periodo de tiempo. Y es que los últimos datos económicos ponen de manifiesto que la economía europea continúa débil (mercado laboral en mínimos, PMIs por debajo de 50 puntos, etc.), desplazándose una vez más las expectativas de recuperación hacia el último trimestre del año, si no es durante 2014.

La reacción del mercado fue muy positiva, con una bolsas europeas que repuntaron en media un 3%, con relajación de las primas de riesgo, moderación de los futuros sobre el Euribor (ya no descuentan una subida del tipo repo a finales del próximo año), y con un cruce euro / dólar que cedía hasta aproximarse al nivel de 1,29. En este caso, el mensaje del BCE, unido a la progresiva normalización de las condiciones monetarias en Estados Unidos, contribuye a dar fuerza al argumento que está dando recorrido a la recuperación del dólar frente al euro. La potencial aparición de divergencias en política monetaria entre ambos bancos centrales, y el diferencial de tipos de interés y de crecimiento favorable a Estados Unidos, deberían redirigir el cruce EUR / USD al nivel de 1,27 durante los próximos meses.
Evolución del cruce EUR / USD
Fuente: Bloomberg

Con permiso de las tensiones políticas en Portugal, el comportamiento positivo de los activos de riesgo podría continuar en el corto plazo si se confirma hoy un buen dato de mercado laboral en Estados Unidos. Las demandas de subsidios por desempleo, y los indicadores adelantados del mercado laboral permiten anticipar un dato de creación en torno a los 175 mil empleos, una cifra que se sitúa en línea con lo esperado por consenso del mercado. Con un ritmo de creación entre los 150 y 200 mil empleos, asumiendo estabilidad en el ritmo de avance de la población activa, el objetivo de la Reserva Federal del 6,5% en tasa de paro se alcanzaría durante el tercer trimestre del próximo año.

Por último, además de la apuesta a favor del dólar, el entorno actual de estabilidad podría ser aprovechado para incorporar en cartera aquellas clases de activo que han sufrido bastante durante estas últimas semanas, y que lo han hecho por efecto arrastre o por sobre reacción del mercado, y no porque esté justificado por fundamentos estructurales. Insisto en la oportunidad que hay en deuda periférica, especialmente la española e italiana, a lo que podríamos acceder a través de títulos de forma directa o mediante fondos de inversión de renta fija europea cuyo posicionamiento actual esté muy sesgado a deuda periférica, especialmente a los dos mercados mencionados anteriormente. Asimismo, volver a comprar algo de renta fija emergente en divisa local puede ser buena opción, toda vez que la estabilización del mercado debería impulsar la entrada de flujos, especialmente en aquellos mercados con mejores fundamentos estructurales, entre los que destaco Asia y, Europa emergente, porque podría verse favorecida de la laxitud de las condiciones monetarias en la zona euro.

Evolución de los fondos Schroder y Fidelity Euro Bond
Fuente: Bloomberg