Ahora, va a aplicar los criterios ASG (Ambientales, Sociales y de Buen Gobierno) a la gestión de todos sus planes de pensiones individuales, asociados y de empleo, con lo que alcanzará unos 20.000 millones de euros entre fondos y planes. Víctor Matarranz, responsable de Wealth Management & Insurance de Banco Santander, ha afirmado, utilizando su perfil oficial en la red social Linkedin como canal de comunicación, que tras la pandemia “la sociedad, las iniciativas privadas y los inversores individuales deben definir su papel en este nuevo panorama".
"¿Queremos ser parte de una economía más sostenible y verde?", se pregunta Matarranz. "¿Estamos convencidos de que es posible un futuro mejor, más justo y más próspero si actuamos en consecuencia? La sostenibilidad -concluye- no es una opción, es la única forma de ayudar a la sociedad a prosperar sin dejar a nadie atrás”.
El objetivo de alcanzar los 20.000 millones en capital inversiones en capital sostenible estará culminado a finales de 2021 y arrancó con la inclusión de criterios sostenibles en la gama de ciclo de vida Mi Proyecto Santander Sostenible, integrada por cinco planes que se adaptan al perfil de inversión y a la edad prevista de jubilación de cada partícipe. También va a aplicar estos criterios en las políticas de voto y engagement (activismo) en las juntas generales de accionistas con el objetivo de fomentar la aplicación de estos principios en las compañías.
Desde el año 2000, Santander forma parte de los índices Dow Jones Sustainability Index World y Dow Jones Sustainability Index Europe, los más importantes para medir el comportamiento sostenible de las empresas en las dimensiones económica, medioambiental y social. Santander es uno de los diez bancos mejor valorados del mundo y el primero en España por su gestión sostenible.
Matarranz añade que “la angustia social y la desigualdad agravada por la pandemia han sido devastadoras". "Incluso antes del covid-19, no estábamos en camino de cumplir con la mayor parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU para 2030. Ahora, con una grave depresión económica que afecta a todo el planeta, es fundamental reconstruir mejor. Las políticas de recuperación se centran en la sostenibilidad para aprovechar la oportunidad única de crear un futuro mejor, apalancada por los generosos paquetes de ayuda de los gobiernos, las organizaciones y los bancos centrales”.
Santander Asset Management es líder en sostenibilidad, y cuenta con el mayor fondo de estas características, el Santander Sostenible Renta Fija 1-3, con un patrimonio superior a los 1.400 millones de euros. Fue la primera gestora en lanzar una gama de fondos Sostenibles, compuesta por un fondo de bonos verdes (Santander Sostenible Bonos), dos fondos mixtos con distinta exposición a Bolsa (Santander Sostenible 1 y 2) y un fondo de renta variable pura (Santander Sostenible Acciones).
También lanzó en 2018 el primer fondo que apuesta por la igualdad de género (Santander Equality Acciones). A ello se suma la iniciativa global Santander GO, la nueva gama de fondos mandatados a gestoras terceras, que incluye el fondo sostenible Santander GO Global Equities ESG, gestionado por Boston Partners (Robeco).
Asimismo, cuenta con el fondo Santander Responsabilidad Solidario, un fondo ético de renta fija mixta euro que en los últimos cinco años ha donado más de 16 millones de euros a diferentes ONGs. En la actualidad, Santander AM gestiona un total de 13 fondos de ISR: 8 en España, 2 en Brasil y 1 en Portugal, México y Chile.
Por otro lado, es la primera gestora española que tiene un equipo especializado en ISR, integrado en el equipo de inversiones, y una metodología de análisis ASG propia. Actualmente, este equipo otorga a más de 15.000 compañías de todo el mundo una calificación ASG, utilizando información y datos de herramientas especializadas de proveedores del sector financiero. La gestora ha firmado los Principios para la Inversión Responsable (PRI, por sus siglas en inglés) de la ONU.
Campaña de pensiones
Banco Santander cuenta con una de las ofertas más atractivas en pensiones del mercado. Ofrece hasta un 5% de bonificación a los clientes que traspasen su plan de pensiones desde otra entidad. El fin es premiar la constancia y el compromiso en el ahorro, por ello el banco ampliará la bonificación a aquellos clientes que realicen aportaciones periódicas a sus planes (desde 100 euros) o suscriban un mayor compromiso de permanencia. Para los traspasos de 2.000 a 30.000 euros la oferta es del 1% del importe traspasado sin aportaciones periódicas o 2% con aportaciones con una permanencia de 5 años (1,5% y 3%, respectivamente, si la permanencia es de 8 años).
Para los traspasos de 30.000 a 60.000 euros del 2% del importe traspasado sin aportaciones periódicas o 2,5% con aportaciones con una permanencia de 5 años (3,25% y 4%, respectivamente, si la permanencia es de 8 años). Para los de 60.000 a 100.000 euros se paga el 3% del importe traspasado con una permanencia de 5 años (4,5% si la permanencia es de 8 años). Y, por último, para traspasos de más de 100.000 euros se abona el 3,5% del importe traspasado con una permanencia de 5 años (5% si la permanencia es de 8 años). Además de esta oferta, los clientes que realicen aportaciones periódicas a partir de 50 euros mensuales a los planes de la gama Mi Proyecto Santander Sostenible obtendrán una bonificación adicional del 1% sobre el importe aportado.
Desde el sector financiero se defienden las aportaciones a los planes de pensiones como un complemento a la pensión pública. Tras la reciente decisión del Gobierno de recortar las ventajas fiscales a estos productos (a partir de enero, los límites de desgravación de los planes de pensiones individuales se reducirían drásticamente, al pasar de 8.000 euros al año a 2.000 euros), la patronal del sector Inverco ha señalado en un comunicado que "la reducción de los límites de aportación que se pretende aplicar a los sistemas de previsión social no va a conseguir los efectos deseados". En cambio, explica, "sí van a perjudicar el desarrollo de la previsión social complementaria en España, con el consiguiente perjuicio para el conjunto de la sociedad y la economía nacional".
Inverco argumenta que el tratamiento fiscal en planes es un salario diferido, no una exención de impuestos, es el único producto que no tributa como rendimiento al ahorro y el incentivo fiscal es muy inferior a la media de la OCDE. Además, eliminar estas ventajas fiscales sería marchar a contracorriente de la tendencia en Europa, donde la Comisión Europea está impulsando el proyecto del Plan de Pensiones Paneuropeo (PEPP). Añaden que no está diseñado para rentas muy altas. Según los datos de la Agencia Tributaria, el 51,3% de los aportantes a planes de pensiones ganan menos de 30.000 euros y el 72% ganan menos de 42.000 euros. Y destaca que los planes de pensiones son pioneros en España de las inversiones ESG (medioambientales, sociales y de buen gobierno), lo que ya está financiando el proceso de descarbonización de la economía, a través de su inversión en empresas y sectores.