Esta ronda de medidas extraordinarias consiste en la compra de bonos vinculados a activos hipotecarios por un valor de 40.000 millones de dólares al mes, sin fecha límite, con el objetivo de impulsar el crecimiento económico y sobre todo mejorar los datos de empleo. Asimismo, el Banco Central estadounidense anunció que mantendrá los tipos de interés a niveles irrisoriamente bajos entre el 0 % y el 0,25 %, hasta mediados de 2015
, en lugar de a finales de 2014 como había dicho en enero. A ello se le suma la ya instaurada “Operación Twist”, de canje de bonos de corto por bonos de largo. Sumando ambos planes de compra se estaría comprando alrededor de 85.000 millones de dólares al mes.

A esta oleada de políticas monetarias expansivas, recientemente, también se ha sumado el Banco de Japón (BOJ), ampliando sus medidas de estímulo en 10 billones de yenes (alrededor de 97.000 millones de euros) y prolongando su programa 6 meses más de lo inicialmente planeado. Por tanto, el valor total de su adquisición de letras del Tesoro, bonos gubernamentales o fondos fiduciarios quedaría así en 80 billones de yenes. El objetivo de las autoridades niponas es por tanto, debilitar el yen, una de las monedas refugio, para incentivar las exportaciones y así no perjudicar a la economía en el corto plazo.

En cuanto a nuestro continente, destacar la ratificación del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) por parte del Tribunal Constitucional alemán, dejando así vía libre para la entrada en vigor de este mecanismo de rescate permanente. Aunque no sin antes, aclarar ciertos condicionantes como que la dotación alemana a este fondo no excederá los 190.000 millones de euros, a no ser que el Bundestag apoye la aportación de dinero extra. Relativo a la última hora sobre este fondo, las noticias apuntan a que Bruselas estudia elevar la capacidad de fondo de 500.000 millones de euros a 2 billones para salvar en caso de que fuese necesario, a los grandes países, aunque esto no tiene ratificación oficial. Eso sí, hay que matizar que se trata de una ampliación de la capacidad del fondo para apalancarse hasta los 2 billones, pero no conlleva un reforzamiento de capital efectivo, por lo que no supondrá la ampliación de las aportaciones.

Sobre el posible rescate “blando” al Estado Español, Jean Claude Junker ha echado más leña al fuego declarando que el Eurogrupo impondrá “exigencias más duras a España” en caso de que esta pida formalmente el rescate. Desde Aspain 11 Asesores Financieros EAFI somos conscientes que toda petición de apoyo financiero por parte del Eurogrupo exige firmar un Memorandum de Entendimiento (MoU) pero ello no quiere decir que en el mismo se tengan que recoger condicionantes adicionales. Las autoridades españolas seguramente estén sopesando el tema, de hecho, ya se ha escuchado la posible congelación de las pensiones. Desde nuestro punto de vista, el Ejecutivo tiene que ser consciente que el rescate parcial es inevitable, y que es mejor hacerlo cuando aún disponemos de cierto margen de maniobra y no cuando estemos acorralados después de meses de dudas y restricciones de financiación. Aunque éste se debe hacer sin mermas de renta adicionales para los ciudadanos españoles, ya que nos podemos instaurar en un camino de no retorno, en una espiral recesiva de la que no sería nada fácil salir. El sendero correcto sería aprovechar la ocasión que se nos brindaría con el rescate parcial (con una financiación más barata) para realizar todas aquellas reformas estructurales centradas en la recuperación de crecimiento, fortaleciendo el tejido empresarial, creando empleo e incentivando el crédito.

Esta semana se antoja complicada para el Ejecutivo español, con la “carta de intenciones” de independencia de Cataluña, la presentación de los Presupuestos para 2013 que marcarán las directrices reformistas, el análisis de nuestro sector bancario por Oliver Wyman para ver las necesidades de capital de nuestro sistema financiero y la nota que la agencia de calificación Moody’s dará al Reino de España.

Desde Aspain 11 Asesores Financieros EAFI, queremos informarles que continuaremos muy pendientes del devenir de los acontecimientos, siendo conscientes del gran empuje que suponen las medidas de política monetaria expansivas de los principales bancos centrales pero sin olvidarnos de que en el telón de fondo macro aún quedan muchos flecos por cerrar, y que una fiscalidad más dura podría suponer un mayor lastre para la economía real.