Melia Hotels como le pasa a todo el sector turístico en general, sigue pendiente, muy pendiente, de lo que ocurre con los niveles de inmunización y las novedades que se van produciendo respecto a la situación global de la pandemia. Muy desigual por territorios, los augurios de vuelos transatlánticos y la situación en Europa que mejorará en función de las vacunas, mantiene todo interés.
Tanto es así que el CEO de la compañía, Gabriel Escarrer, es muy activo en redes sociales para implementar medidas que ayuden a mantener tanto la actividad, como la idea de superar esta fase de la pandemia. Esta pasada semana se unía a la iniciativa de cribados masivos en las farmacias que implementará Galicia tras el Estado de Alarma, para prevenir un descontrol en los contagios.
Mientras, la compañía hotelera sigue con la idea de llegar en junio a los 100 establecimientos abiertos de la cadena en todo el mundo y elevar el nivel hasta los 120, como ya les hemos contado, para septiembre. Y además continúa con sus proyectos que miran sin duda a Asia. Vietnam ha sido una de sus constantes en los pasados meses. Ahora presentan un nuevo hotel que estará en marcha en 2025 en China. Se trata del duodécimo proyecto, tras seis hoteles operativos y 6 en proceso de apertura o construcción. El tercero además, de la marca INNSiDE en Xian.
Y es que la mejora de Melia Hotels, dentro y fuera del mercado está en las vacunas, con una dependencia total. De momento, supera el compás de espera , incluso en bolsa a pesar de los contagios y de las reticencias sobre alguna vacuna. En su gráfica de cotización comprobamos como el valor cierra en la cota de los 7 euros por acción que no recupera desde el pasado 16 de marzo. Mantiene además a buen ritmo los avances, tanto semanales, en los últimos 4 días el valor recupera un 8,12%, como anuales con ganancias del 22,4% desde que comenzara el ejercicio.
Los inversores parecen seguir confiando en el valor, con su expectativa de futuro y sobre todo, tras el decidido respaldo este mes de Societé Generale que proyecta un precio objetivo para el valor de 8,5 euros por acción desde los 7,4 euros anteriores, lo que le otorga un potencial del 22% con consejo que eleva a comprar desde mantener el valor. Las razones, que Meliá podría volver a generar efectivo en cuanto su ocupación alcance el 60% de capacidad, lo que podría llegar en 2022. Consideran que el presente ejercicio dependerá de las aperturas y la movilidad, pero sí esperan que para el año que viene se produzca un avance más pronunciado en su mejora.
Los indicadores premium de Estrategias de Inversión nos marcan una posición a la baja para Melía Hotels de 6 puntos de los 10 posibles, con tendencia alcista a largo plazo, momento total lento y rápido positivo y también con volumen a largo plazo creciente. En el lado negativo destaca para el valor la tendencia a medio plazo que es bajista, el volumen a medio plazo que es decreciente y el rango de amplitud, es decir la volatilidad del valor, que se muestra creciente a medio y largo plazo
Según señala el analista técnico de Estrategias de Inversión, José Antonio González, en Meliá Hotels “el precio lucha por registrar una zona de soporte en torno a los 6,15 euros por acción, intentado en varias ocasiones recuperar su media móvil simple de 40 periodos o de medio plazo. Sin embargo, el reducido volumen de contratación resta potencial al movimiento e invita a la prudencia, vigilando de cara a las próximas sesiones la zona de soporte proyectada a partir de los 6,15 / 5,91 euros por acción”.
Meliá Hotels en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación