El grupo inmobiliario ya advirtió cuando remitió al supervisor del mercado las cuentas de cierre de septiembre de 2008 que quedaban pendientes de incluir el efecto de la variación del valor de los activos inmobiliarios.

En su actual comunicación a la CNMV, Martinsa reitera que la actividad de la compañía se ve afectada por la situación de concurso de acreedores en que actualmente está inmersa y por el "endurecimiento de las condiciones de financiación".


Según detalla, esta coyuntura ha "impedido el cierre de acuerdos corporativos de venta de suelos, paquetes de viviendas y el lanzamiento de nuevos productos".

En el momento de presentar el concurso de acreedores, Martinsa Fadesa presentaba una deuda total de 7.005,44 millones de euros, equivalente al 94,6% del valor total de sus activos, que se cifra en 7.404,06 millones de euros, según los datos el informe de la empresa realizado por sus administradores concursales.

Según estos datos, el patrimonio neto de la compañía que en julio de 2008 protagonizó la mayor suspensión de pagos es de 398,62 millones.