A los inversores se les acumula el trabajo. No saben cómo asimilar las declaraciones de Trichet y Zapatero, ni la actualización de previsiones económicas presentadas por la Comisión Europea, que augura que la economía española entrará en recesión en el segundo semestre del año. Las malas noticias se acumulan, en un momento en el que intentaban recuperar el aliento tras la decisión de la OPEP, que decidió por sorpresa recortar la producción de crudo en 520.000 barriles diarios. Y todo ello aderezado con la confirmación de que Lehman Brothers no recibirá dinero fresco que le ayude salir de la difícil situación en la que está inmersa por su exposición a la crisis. La Comisión Europea ha vuelta a dar un jarro de agua fría a los inversores.
Prevé que la economía española entrará en recesión en el segundo semestre del año –dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo-, por lo que el PIB español registrará un crecimiento de sólo un 1,4% en 2008, con una inflación del 4,5%
. Unas previsiones mucho más negativas que las que lanzó sólo minutos antes el presidente del gobierno. José Luis Rodríguez Zapatero se mostró confiado en que la escalada de precios no superará en 4% a final de año y la economía española crecerá un 1,6% -dos décimas más de la previsión de Bruselas-. Durante la comparecencia extraordinaria a petición propia ante el Congreso de los Diputados, Rodríguez Zapatero ha adelantado que el principal objetivo de su gobierno es la recuperación del empleo. En este sentido, ha adelantado varias medidas para favorecer al sector constructor. Zapatero anunció la puesta en marcha de una nueva línea de mediación por parte del Instituto de Crédito Oficial(ICO) dotado inicialmente con 3.000 millones de euros para ampliar los plazo de los préstamos a los promotores inmobiliarios. Además, adelantó que el ejecutivo autorizará la creación de sociedades cotizadas en el mercado inmobiliario con un régimen fiscal favorable que añadirá liquidez a las empresas del sector.Trichet echó más leña al fuego y aseguró que la incertidumbre en torno al crecimiento económico en la zona euro sigue presente, mientras persisten los riesgos para la estabilidad de precios en el medio y largo plazo. El presidente del Banco Central Europeo, que compareció ante el Parlamento comunitario, recordó que la institución que preside sigue determinada a “anclar” las expectativas de inflación para mantener el poder adquisitivo en la eurozona y contribuir a un crecimiento sostenible que favorezca la creación de empleo. Además, la OPEP recortó finalmente su producción en 520.000 barriles diarios para intentan mantener la cotización del crudo, que en apenas dos meses ha caído 60 dólares hasta los 100 dólares/barril, en un momento en el que la Agencia Internacional de la Energía ha vuelto a recortar su previsión de demanda mundial de petróleo para 2008 y 2009 por la ralentización económica. La AIE cree que la demanda global ascenderá a los 86,8 millones de barriles diarios este año, lo que supone 100.000 barriles menos respecto a su anterior estimación. La cotización del crudo aún da un respiro a unos inversores que intentan asimilar unas previsiones nada halagüeñas, que se unen a los problemas de una de las grandes financieras estadounidenses. Lehman Brothers no podrá beneficiarse de la inyección de liquidez prevista. Finalmente, el banco coreano KDB ha rechazado convertirse en el caballero balco de la firma por desacuerdos sobre los términos del acuerdo previo y las condiciones del mercado financiero doméstico y extranjero. Con todo, el Ibex35 cae un 1,46 % hasta los 11.184 puntosGráfico Ibex35

