Las acciones de Lehman cayeron el lunes un 8% a 33,83 dólares en la bolsa neoyorquina después de los informes negativos de los analistas de dos analistas de Wall Street. Sus títulos ceden cerca del 50% este año frente al descenso del 20% en lo que va de año de otros rivales como Goldman Sachs Group Inc. y Morgan Stanley. Lehman es la firma independiente de menor tamaño de Wall Street ahora que ha cerrado la venta de Bear Stearns Cos. a J.P. Morgan Chase & Co. No obstante, Lehman señala que está bien posicionado para capear la actual crisis del mercado crediticio. El consejero delegado de Lehman, Richard Fuld Jr., tiene experiencia en situaciones difíciles. En 1998, hizo frente a los rumores que hablaban de una crisis de liquidez provocada por el fondo de cobertura Long-Term Capital Management, que estuvo al borde del colapso. El año pasado, Lehman recaudó 6.000 millones de dólares. En marzo reforzó sus finanzas cuando, al igual que todos los bancos de inversión estadounidenses, pidió dinero prestado directamente a la Reserva Federal. Sin embargo, los inversores siguen preocupados porque creen que dado su tamaño, Lehman posee más titulizaciones vinculadas a los sectores residencial e inmobiliario que otros grandes bancos de inversión de Wall Street, según Bernstein Research. "Lehman todavía tiene mucha exposición al mercado hipotecario y van a necesitar capital para salir adelante", afirmó Glenn Schorr, analista de UBS. El lunes, Standard & Poor's rebajó la calificación sobre Lehman, Merrill Lynch & Co. (MER) y Morgan Stanley. Pero la agencia se centró especialmente en Lehman e indicó que espera un "deterioro relativamente significativo" de sus resultados para el segundo trimestre, que finalizó el 31 de mayo.