El Consejo de Administración de Abengoa ha aprobado la emisión de bonos convertibles en acciones de la Sociedad por un importe inicial de doscientos millones de euros, ampliable a 250 millones de euros, con suscripción incompleta y vencimiento a siete años, según ha informado hoy la CNMV.

Ana Ariza, analista de Foncava Gestióntacha la operación de “previsible”, después de su alto ritmo de crecimiento, que ha tenido un efecto de déficit tarifario importante. A ojos de la analista Abengoa sigue manteniendo una fortaleza en sus resultados relativamente importante y espera que “la emisión de deuda tenga el suficiente de deuda para apoyar la apuesta de crecimiento que está haciendo la compañía a través de las energías renovables”. Es por tanto, una operación que los accionistas castigan, pero que a medio plazo va a beneficiar a la gestión de la empresa.


Esta emisión, dirigida por BNP Paribas y Société Générale y con vencimiento a 7 años, ofrecerá un interés fijo anual de entre el 4,00 y el 4,5 por ciento. Sin precio de conversión aún fijado, Abengoa ha dicho que espera cerrar la suscripción y el desembolso el próximo 3 de febrero.

Por tanto, perspectivas de crecimiento para la compañía que también en Bolsa cuenta con una buena tendencia, “alcista a corto plazo”, apunta Juan Enrique Cadiñanos, codirector de EJD Valores, quien afirma que de superarse los 24 euros, actual resistencia, podría alcanzar su objetivo principal, 28 euros, para luego subir hasta los 30 euros.