La atención se mantiene en la inflación y su potencial impacto en las políticas monetarias de los grandes bancos centrales. “Si la inflación “no afloja” en EEUU en la segunda mitad del ejercicio, es muy factible que la Reserva Federal (Fed) se vea forzada a empezar a retirar estímulos monetarios antes de lo previsto, comenzando con reducir sus compras de bonos y, meses después, subiendo sus tipos de interés de referencia -el mercado espera que comience a incrementar tipos a finales de 2022 mientras que la Fed mantiene que no lo hará antes de finales de 2023”, indican los analistas de Link Securities.
“La inflación es y será en el corto/medio plazo la variable a “seguir” por los inversores, variable que determinará en gran medida sus estrategias de inversión”, añaden.
Los mercados de valores europeos y estadounidenses se tomaron ayer un respiro tras varias sesiones muy complicadas, cerrando la mayoría de sus principales índices al alza
Ayer se publicó en EEUU el índice de precios de la producción (IPP) del mes de abril, índice que, al igual que había hecho el IPC del mismo mes el día precedente, superó con creces lo esperado por los analistas. Sin embargo, en esta ocasión los inversores optaron por obviar este hecho, probablemente porque ya lo esperaban y lo tenían más que descontado.
El Departamento de Trabajo publicó ayer que el índice de precios de la producción (IPP) subió el 0,6% en el mes de abril con relación a marzo, superando las expectativas de los analistas, que esperaban un menor incremento de este indicador de precios en el mes, del 0,3%. En tasa interanual el IPP subió en abril el 6,2% frente al 4,2% que lo hizo en marzo y el 5,9% que esperaban los analistas. Esta es la mayor tasa de crecimiento interanual alcanzada por esta variable en un mes desde que se modificó la forma de calcularlo en 2009.
Por otro lado, las peticiones iniciales de subsidios de desempleo bajaron en 34.000 en la semana finalizada el 8 de mayo, hasta las 473.000 en cifras ajustadas estacionalmente, marcando de esta forma un nuevo mínimo desde el inicio de la pandemia. El consenso de analistas esperaba una cifra superior, de 499.000 peticiones. La media móvil de las últimas cuatro semanas de esta variable bajó a su vez en 28.250 peticiones, hasta las 534.000, marcando también un mínimo post pandemia.
El Dow Jones cerró la jornada del jueves con una subida del 1,29 % tras una sesión de rebote en la que se recuperó parte de lo perdido el día anterior por el miedo al repunte de la inflación.
El S&P 500 ascendió un 1,22% y el Nasdaq progresó un 0,72%. El parqué neoyorquino aprovechó para comprar acciones a un precio más barato, sobre todo las tecnológicas, tras las caídas que provocó el miércoles el dato de inflación de abril en EE.UU.
La atención en la sesión de hoy en la publicación de las ventas minoristas y de la producción industrial de EEUU del pasado mes de abril, así como de la lectura preliminar de mayo del índice de sentimiento de los consumidores.
Las bolsas japonesas lideraban el repunte de los mercados asiáticos el viernes, en consonancia con la tendencia alcista en Wall Street, donde se compraron acciones que se beneficiarían más de una reactivación económica.
El repunte interrumpió una racha bajista de tres días para la renta variable a nivel mundial, ya que los nervios del mercado por la aceleración de la inflación en Estados Unidos se calmaron cuando los dirigentes de la Reserva Federal reiteraron que las presiones sobre los precios derivadas de la reapertura de la economía resultarían transitorias.
"Las acciones estadounidenses subieron, por lo que hay un poco de alivio en Asia", dijo Frank Benzimra, director de estrategia de acciones de Asia en Societe Generale en Hong Kong.
Sin embargo, "ciertamente vamos a tener algo de volatilidad a corto plazo", ya que los mercados reaccionan al IPC y otros indicadores económicos en busca de pistas sobre el camino de la política monetaria estadounidense.
La Fed podría abrir el debate sobre la reducción de sus compras de activos tan pronto como la reunión de política monetaria del próximo mes, según este analista.
Según una encuesta realizada por Reuters, los economistas estiman que la inflación medida en términos del índice de precios de los consumidores o PCE debe alcanzar el 2,8% para empezar a incomodar a los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC). Los economistas creen que la Fed toleraría una tasa por encima de ese nivel durante tres meses antes de actuar. Las predicciones se mantuvieron en un rango de entre el 2,3% y el 4,0% con una respuesta modal del 2,5%. Esta última compara con la estimación previa del 1,8% de marzo, y es la mayor desde febrero de 2020.
El euro avanza frente al dólar y se intercambia a 1,211 billetes verdes.
En el mercado de materias primas, los precios del petróleo se mantienen en rojo. El Brent de referencia en Europa pierde un 0,15%, hasta los 66,97 dólares; al tiempo que el West Texas estadounidense ced eun 0,02%, hasta los 63,80 dólares.