Los despidos afectarán también a los trabajadores procedentes de la quebrada Lehman Brothers contratados por la compañía nipona.

A principios de esta semana, el presidente de la firma, Kenichi Watanabe, aseguró que Nomura se esforzará por lograr un beneficio antes de impuestos de 500.000 millones de yenes (5.388 millones de dólares) en el año fiscal 2010, mediante la expansión de su negocio de inversión en mercados emergentes.

Durante tres trimestres consecutivos Nomura ha registrado números rojos.

Además se espera que esta compañía deba asumir unos costes de 2.000 millones de dólares al haber acogido las operaciones y los empleados de Lehman Brothers en Europa, Oriente Medio y en la región de Asia-Pacífico, incluido Japón.

Para reforzar su capital base, la compañía planea vender 410.000 millones de yenes (4.418 millones de dólares) en bonos antes de finales de año.