El beneficio bruto de explotación (EBITDA) fue de 417,3 millones, el 26,8 por ciento menos que un año antes, debido al incremento de los costes energéticos y a la subida del precio de los combustibles.
La disminución de la demanda en edificación residencial fue más significativa en los subsectores del hormigón y el mortero, cuyas ventas disminuyeron el 23,4 y el 31 por ciento, respectivamente.
Más moderada fue la caída de las ventas de cemento, que disminuyeron el 15,2 por ciento, hasta poco más de 15 millones de toneladas.
El endeudamiento financiero neto alcanzó los 1.762,3 millones de euros al cierre del ejercicio, el 15,9 por ciento más que un año antes.
Las inversiones totales realizadas en 2008 ascendieron a 315,3 millones frente a los 322,1 millones del años anterior.
La inversión financiera fue de 153,6 millones, de los que el 88,3 por ciento correspondió a la adquisición adicional en Corporación Uniland, con lo que la participación en este grupo aumentó hasta el 65,5 por ciento.
La plantilla media empleada por el grupo en 2008 fue de 4.220 personas frente a las 4.286 de un año antes.
