Las previsiones realizadas por los expertos consultados por Reuters apuntaban a que las entidades acudirían en masa a la subasta con peticiones de liquidez de entre 310.000 y los 600.000 millones. No obstante, estos datos han sido revisados al alza, puesto que hace dos días se estimaba una demanda de entre 250.00 y 500.000 millones.

El tipo de interés impuesto a estas subastas se corresponde con el precio oficial del dinero dentro de la zona euro, esto es, al 1%. Las entidades bancarias han acudido en masa a la barra libre de liquidez abierta por la institución presidida por Mario Dragui a la que han solicitado hasta 489.191 millones de euros en préstamos a tres años. Según los analistas, si bien este tipo de medidas es óptima para incentivar los créditos y para que los bancos cuenten con liquidez en dólares para hacerse con nuevos activos, la parte negativa se refiere a la dependencia del BCE que pueda llegar a generar a largo plazo.

Tal y como señalan los analistas financieros, los bancos podrían reinventir este dinero en la compra de deuda pública y que tendría un efecto beneficioso para los estados, así como para los propios bancos al adquirir papel a un tipo de interés del 1% y comprar bonos con una rentabilidad ofrecida del 4%.

La siguiente subasta a tres años tendrá lugar el próximo 29 de febrero.