El déficit de la balanza por cuenta corriente europea aumentó como consecuencia de los déficits registrados en las balanzas de transferencias corrientes (6,9 millones de euros), bienes (4,4 millones de euros) y rentas (1,2 millones de euros), que se compensaron, en parte, con un superávit en la balanza de servicios (5 millones de euros).

En octubre de 2011, la balanza por cuenta corriente acumulada de doce meses desestacionalizada registró un déficit de 58,7 millones de euros (aproximadamente el 0,6% del PIB de la zona del euro), frente al déficit de 29,5 millones de euros contabilizado un año antes. Este incremento del déficit por cuenta corriente fue resultado, principalmente, de un cambio de signo de la balanza de bienes (que pasó de un superávit de 20,3 millones de euros a un déficit de 14,4).