JP Morgan acaba de elevar en un 5,26% el precio objetivo de Acerinox, compañía española especializada en la fabricación de aceros inoxidables, desde los 11,4 euros anteriores hasta 12 euros. Este ajuste supone para la compañía un potencial de subida del 15,71%. Acerinox, uno de los valores que lideraban la apertura del Ibex 35 hoy, se revalorizaba a primera hora un 1,17%.
El pasado lunes, Acerinox también recibió la revisión al alza de su precio objetivo por parte de Deutsche Bank (14 euros por acción) y de Credit Suisse (10 euros por acción), por lo que la confianza depositada por los expertos en el valor es palpable también en el mercado.
Según el consenso de analistas de Reuters, el potencial que le otorgan al valor es significativamente menor que el de JP Morgan: un 5,88% después de situar su precio objetivo en 10, 98 euros teniendo en cuenta que el precio actual de las acciones del valor se sitúa en 10,37 euros. De las 20 firmas que siguen la cotización de Acerinox, 17 de ellas aconsejan comprar y solo 2, mantener.
Por otro lado, concluida la temporada de presentación de cifras empresariales, cabe recordar que Acerinox subía casi un 7 % en la primera sesión del mes de marzo después de volver a beneficios en 2020, al ganar 109 millones de euros y un beneficio neto de 49 millones de euros frente a las pérdidas de 60 millones en 2019. En lo que va de 2021, los títulos de la firma presidida por Rafael Miranda remontan en Bolsa casi un 13% desde los 9 euros en que cerró en 2020.
En lo que respecta al resultado bruto de explotación (Ebitda) de Acerinox, fijan una senda de 470 millones de euros en 2021 y de 537 millones de euros en 2022, según una presentación de la compañía dirigida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En cuanto a análisis técnico, según los indicadores premium de Estrategias de Inversión, Acerinox se encuentra en fase alcista con 8 puntos de los 10 totales. Su tendencia en ambas vertientes es alcista, al igual que la tendencia y el momento total. Su volumen a largo plazo es decreciente, al contrario que a medio plazo. En negativo también la volatilidad, medida en términos del rango de amplitud que se mueve de forma creciente a medio y largo plazo.