nglo Irish dijo que la votación prevista de los accionistas ha sido abandonada tras la decisión del gobierno.

El banco seguirá operando con normalidad y Lenihan dijo que todos los depósitos de los clientes estaban garantizados
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El ministro agregó que el banco cumpliría sus obligaciones de deuda.

Pero los accionistas, que han visto el valor de sus inversiones en el banco prácticamente eliminadas ante la caída de las acciones de Anglo a 20 céntimos desde los 17 euros en 2007, corren el peligro de quedarse sin nada.

Las acciones de la compañía permanecen suspendidas hoy en las bolsas de Dublín y Londres.

De acuerdo con el plan de nacionalización, un asesor nombrado por el Gobierno, decidirá el valor del banco y la compensación apropiada. "Si el asesor decide que el banco no tiene valor, la compensación será cero", expresó Lenihan. Un accionista, Charlie Moore, dijo que la decisión era "catastrófica". Lenihan no indicó cuál sería el coste de la nacionalización para el contribuyente.

El banco sacudió al sector el mes pasado cuando el entonces presidente, Sean Fitzpatrick, dijo que no había informado a los inversores sobre unos préstamos recibidos de la entidad por importe de 87 millones de euros.

En la actualidad se está llevando a cabo una investigación sobre los préstamos de los bancos irlandeses a sus directores.