El grupo bancario holandés ING anunció hoy que el próximo 13 mayo pagará al Estado holandés 2.000 millones de euros, con lo que reduce hasta 3.000 millones de euros su deuda con las arcas públicas.

ING saldará esta deuda comprando su propias acciones al Estado, que en diciembre de 2008 concedió una inyección de capital al banco por valor de 10.000 millones de euros y como apoyo para que la entidad pudiese afrontar la crisis financiera internacional.