IAG se revaloriza este miércoles por encima del 1,5%. El grupo de aerolíneas que cuenta con marcas como Iberia, Vueling, British Airways o Aer Lingus se deja en lo que va de año un 77,4% en el selectivo español, cerca del euro por acción.

Este miércoles IAG asimila el equivalente al 60% de sus acciones, incorpora a su cotización 2.979 millones de nuevas acciones de un total de 4.971 millones. El holding de aerolíneas ha concluido un proceso en el que ha captado 2.741 millones de euros con el objetivo de fortalecer su balance y reducir su endeudamiento, mejorar la liquidez y proporcionar protección ante un escenario todavía incierto en su sector.

IAG sube en el Ibex 35, el día que empiezan a cotizar sus nuevas acciones

Los accionistas del grupo suscribieron el 92,75% de los nuevos títulos a los que tenían derecho en el periodo de suscripción preferente. Además, en el periodo de asignación de títulos adicionales hubo una sobredemanda del 211% sobre la cantidad de acciones puestas a la venta.

“Nos complace que nuestros accionistas hayan apoyado el aumento de capital, lo que fortalece la posición financiera y estratégica de IAG”, destacó el consejero delegado de IAG, Luis Gallego, que gana “flexibilidad para hacer frente a la situación actual y coloca al grupo en una posición más fuerte para aprovechar una recuperación de la demanda de transporte aéreo”.

Qatar Airways, su mayor accionista con el 25,1% del capital acudió a la ampliación de capital, lo mismo que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) que puso 69 millones de euros con el objetivo de mantener su actual 2,52% de las acciones. Las gestoras de fondos internacionales Capital Group, Blackrock, Aberdeen Standard e Invesco son otros de sus accionistas significativos. 

La ampliación de capital restituye el nivel de liquidez, 7.600 millones a final de agosto más la ampliación de capital, previo a la pandemia en un escenario en el que la directiva ha revisado a la baja sus perspectivas de tráfico 2020 y 2021 frente a su previsión de julio tras la reintroducción de requisitos de cuarentena en Reino Unido y otros países europeos.

El mercado penaliza a la compañía a medida que el número de casos de coronavirus aumentan en Europa y en función de las medidas de confinamiento aplicadas en Europa.