En mayo el Tesoro vendió 3.510 millones a los inversores en letras a 3 y 9 meses, aunque se vio obligado a elevar el interés para colocar todo lo previsto.
En las dos emisiones de la semana pasada el Tesoro consiguió colocar el máximo que se había fijado, aunque tuvo que elevar los intereses después de que la Reserva Federal (Fed) anunciara una retirada progresiva de los estímulos monetarios y provocara el repunte de la prima de riesgo.
Como telón de fondo, los repuntes de la rentabilidad del bono a 10 años de los últimos días, que se vuelve a colocar por encima del 5%, mientras la prima de riesgo repunta hasta los 335 puntos básicos.