George Papandreu, primer ministro griego, propuso ayer la formación de un nuevo gobierno de unidad nacional
y aseguró a la oposición que está dispuesto a dimitir del cargo si ello sirve para facilitar la formación de este nuevo ejecutivo.

En los frecuentes contactos telefónicos mantenidos entre Papandreu y el líder conservador, Antonis Samarás, el propio primer ministro propuso retirarse del cargo para ser sustituido por "alguien de común acuerdo", según informan fuentes cercanas al jefe del Ejecutivo. Estas declaraciones se producen después de que Samarás, el líder de Nueva Democracia, afirmase a la prensa helena que en un gobierno de unidad "Papandreu no podría ser el primer ministro".

Tras fracasar las conversaciones con la oposición para formar un gobierno de unidad nacional
, el propio Papandreu anunció anoche que formará hoy jueves un nuevo gobierno que se someterá a una moción de confianza en el Parlamento. "Continuaré con el mismo recorrido, en el camino del deber, junto con el grupo parlamentario del PASOK, sus miembros y el pueblo griego", dijo Papandreu en una declaración en la televisión estatal.