Lo que genera por tanto más interés es el ratio BTC o Bid To Cover (demanda con respecto a la oferta) y si se cumple o supera el objetivo de colocación. En el caso de la subasta de hoy, todo lo que podía salir bien ha salido bien. Por un lado, el ratio BTC ha quedado por encima de las subastan anteriores, mostrando que aún hay mucho interés por nuestra deuda. En cuanto a la colocación, se ha superado el objetivo máximo.
Teniendo en cuenta lo anterior, ¿por qué el Ibex se ha dado la vuelta cuando se han conocido estos datos? Sencillamente, porque el pesimismo sobre España es máximo y esto lleva a buscar siempre la parte negativa de todo dato que se publique. En este caso, la mala interpretación viene por parte de los bancos españoles. Dado que estas subastas del Tesoro vienen principalmente soportadas por la banca nacional, el mercado ha querido entender que la fuerte demanda de hoy expone aún más a nuestros bancos a la deuda española, haciéndolos más vulnerables al riesgo país.
De ahí que, por ejemplo, el Banco Santander -que estaba subiendo cerca de un 1% antes de la subasta- se diera la vuelta pasando al terreno negativo. Además, la rentabilidad pagada ha quedado ligeramente por encima de la del mercado, lo que se ha sentado muy mal, generando más desconfianza.
Con todo, los mercados no están siendo objetivos y buscan cualquier excusa para atacar todo lo que tenga que ver con España, por muy rebuscado que sea el motivo. De hecho, un informe de JP Morgan apuntaba que los bancos españoles conservan aún cerca de 90.000 millones de euros del programa LTRO del Banco Central Europeo, lo que les daría incluso la posibilidad de cubrir todo lo que le queda al Estado por emitir en lo que queda de año. No es entonces un problema de liquidez, sino principalmente de confianza.