La cifra de 1,97 millones es ligeramente menor a lo pronosticado por los expertos, que anticipaban que el desempleo se situaría en unos dos millones de personas.
No obstante, los analistas estiman que el paro puede alcanzar los tres millones a causa de la actual recesión británica.
El sector industrial es el más afectado por el paro, como es el caso del sector del acero y el automotor.
El financiero también ha resultado castigado por la crisis, como es el caso del Royal Bank of Scotland (RBS), que ayer anunció la supresión de 2.300 puestos de trabajo.
Para hacer frente al deterioro de la situación laboral, el primer ministro británico, Gordon Brown, se reunió hoy con unos 22 empresarios para analizar la manera de crear empleo.
En la reunión, celebrada en la residencia oficial de Downing Street, Brown les dijo a los empresarios: "En esta mesa hay algunos de los mayores empleadores del país. Me doy cuenta de que estos son momentos difíciles por la recesión financiera global".
"Estoy seguro de que, al trabajar juntos, podemos ayudar a crear oportunidades de empleo", agregó el jefe del Gobierno.
Entre los invitados a ese encuentro figuraban representantes de la cadena de supermercados Sainsbury's, de la compañía de autobuses National Express y de la cadena de hoteles Travelodge.
El representante de la confederación sindical Trade Union Congress (TUC), Richard Exell, dijo hoy que es necesario aplicar medidas para ayudar a la gente que ha perdido el empleo.
"Pero también medidas para ayudar a los que están en peligro de quedar desempleados", agregó.

