"En muchos sentidos, la Unión Europea y la zona del euro están en una encrucijada", afirma el FMI en su informe Perspectivas Económicas Mundiales publicado hoy.

Menciona, en ese sentido, que el respaldo popular al euro aún es sólido pese a las tensiones creadas por la costosa factura compartida de la crisis de deuda soberana en países como Grecia, Irlanda y ahora Portugal.