El beneficio neto de ROVI
ha caído un 32% hasta los 12,9 millones de euros. El EBITDA también ha sufrido un retroceso, en este caso de un 27% hasta los 16,2 millones de euros, en el primer semestre del año, en relación con el mismo periodo de 2010.

El motivo principal es el impacto del ingreso no recurrente de 11,8 millones de euros registrado en el segundo trimestre de 2010, originado por la diferencia entre el valor razonable y el precio de adquisición de los activos de Frosst Ibérica.

Por otra parte, los ingresos operativos han aumentado un 32% hasta alcanzar los 95,9 millones de euros en el primer semestre de 2011, como consecuencia, según apuntan desde ROVI, de “la fortaleza del negocio de especialidades farmacéuticas, cuyas ventas crecieron un 21%, y del negocio de fabricación a terceros, que creció un 84%en el primer semestre de 2011”.

Desde ROVI confirman las previsiones de crecimiento de ingresos operativos que se sitúan en “la banda de dos dígitos y de las previsiones de crecimiento de beneficio neto recurrente (excluyendo el ingreso no recurrente de 11,8 millones de euros registrado en 2010) de un dígito para el año 2011.”

ROVI ha acabado la sesión plano en 5,45 euros por acción.