Según este estudio, realizado con el fin de establecer el perfil del ahorrador español y las preferencias a la hora de invertir tanto por tipo como por conocimiento de producto, “casi un 70% de los ahorradores tiene un conocimiento adecuado de los productos financieros, siendo los depósitos y los planes de pensiones los productos más populares, frente a bolsa, seguros y fondos de inversión”, explicó Mazarredo. Además, continuó, “cuanto más dinámico es el ahorrador, mayor conocimiento financiero dice tener: 8 de cada 10 ahorradores dinámicos tienen un conocimiento financiero medio o alto, frente a 5 de cada 10 en el caso de los ahorradores de perfil conservador”. De la misma forma, “los inversores con alta capacidad de ahorro son los que más conocimiento financiero tienen (23,6%) y se sitúan diez puntos por encima de aquellos con una capacidad de ahorro media (13,6%)”. Atendiendo al nivel de estudios –concluyó-, “los universitarios son los que mejor conocen los productos financieros (casi el 80%)”.


Sobre la confianza de los inversores españoles a la hora de contratar algún producto, Rengifo expuso que
“tenemos un alto grado de confianza en el sistema y en las entidades financieras, ya que son los principales prescriptores en los que confían más de la mitad de los ahorradores -el 63%-, y en este sentido, las entidades están haciendo un esfuerzo de formación de sus redes de venta, aunque la figura del asesor independiente cobra cada vez más relevancia en los últimos años -14,8%-“. Afirmó que “debemos trabajar sobre el perfil conservador del ahorrador español para vehicular sus inversiones y adaptarlas al perfil”.

“Los principales criterios para invertir en tiempos de crisis, son la transparencia y la confianza, y es tarea de la industria incidir en la universalización de los productos de ahorro”, concluyó Martínez-Aldama.