A este respecto, el máximo ejecutivo de Citi señaló que la entidad ya se ha desprendido de más de veinte negocios como parte de su plan de reestructuración, y reconoció que el banco planea vender otros tantos principalmente en el área de préstamos al consumidor, especialmente en Europa, puesto que "se ha producido un cambio en los mercados de financiación al consumo que provoca una menor disponibilidad de fondos, lo que hace que sea una actividad menos robusta".

Asimismo, Pandit precisó que el 'nuevo Citigroup' que surgirá tras la reestructuración tendrá tres líneas de negocio principales con prácticamente el mismo tamaño: banca de consumo, valores (que incluirá las operaciones de banca de inversión) y servicios financieros.

Por otro lado, el consejero delegado de Citi afirmó que Asia será parte importante del futuro de la entidad y destacó que actualmente la región ya aporta alrededor del 40% del beneficio del banco.

En este sentido, Pandit hizo hincapié en la voluntad de Citi de posicionarse como un nexo de unión entre las compañías de EEUU y Asia. 'Hay muchas compañías en EEUU que quieren acceder a Asia y nosotros queremos estar ahí para ayudarlas", dijo Pandit.

Citigroup obtuvo un beneficio neto de 4.279 millones de dólares (3.036 millones de euros) al cierre del segundo trimestre, en contraste con los 'números rojos' de 2.495 millones de dólares (1.771 millones de euros) del mismo periodo del año anterior, gracias al impacto positivo de la cesión del control de su filial de gestión patrimonial Smith Barney a Morgan Stanley, con la que formó el pasado 1 de junio una 'joint venture' en la que Citi cuenta con el 49% del accionariado, así como de otras desinversiones.